sábado, 12 de julio de 2014

¡Cuando la zorra no llega a las uvas…… dice que están verdes!


O dicho de manera más escatológica, le excusa del enfermo que se meaba en la cama y decía que sudaba; y en España, queridísimos lectores, esos refranes o “dichos” se usan para señalar a aquellas personas que ante la imposibilidad de responder a determinada cuestión con un mínimo de solvencia, se sacan de la manga cualquier excusa y por peregrina que esta sea, con tal de justificar dicha incapacidad. Y esto es lo que ha hecho el ínclito personaje Apologista Mario Olcese, en un video publicado el 30/06/14 y en principio dirigido a aquellos de sus seguidores que le preguntan la razón de por qué no responde a las objeciones que se le plantean desde este blog por un servidor y circunstancia de la que constantemente ya advierto al “personal”, eso es, que no dará respuesta a ninguna de mis objeciones sencillamente porque no puede hacerlo, a menos eso sí, de que se retracte de la mayoría de disparates que publica como “enseñanzas”.

Sin embargo, lo que más o menos nos viene a decir el personaje en cuestión, es que no responde a mis demandas porque no vale la pena perder el tiempo tontamente, intentando enseñar a esos que, con “mala intención”, lejos de querer aprender y en una más que manifiesta terquedad, lo único que buscan es “destruir” mediante su recalcitrante obra de objeción, aquello que otros (se supone que él se incluye en este grupo) quieren edificar sobre ellos en un esfuerzo por sacarlos de su error…… excuso decir que me malicio que ello va dirigido en primera instancia a un servidor, pues soy el que continuamente le está poniendo “las peras al cuarto” a ese maestro de lo imposible y al que le recuerdo, (por aquello de la fragilidad de memoria y todas esas cosas), que ya le he obligado a rectificar alguna que otra de sus disparatadas proposiciones como, por ejemplo, la de los “millones, miles millones” que supuestamente tenían que reinar con Cristo; dicho lo cual, veamos sobre qué pasaje se apoya el Sr. Olcese para desarrollar su excusa y que en esta ocasión tiene que ver con Judas 22:

A algunos que dudan, convencedlos.” (RV 1960).

Pero de entrada y como es norma en él, el Sr. Olcese ya aplica mal dicho pasaje, pues un servidor no tiene duda alguna sobre los temas que le planteo y a los que es él, el que no puede responder…… luego habría que pensar que las “dudas” estarán en su tejado y no en el mío. Por otra parte y en el mismo inicio de su grabación, parece ser que dicho “estudioso” de la Biblia me incluye dentro del grupo de aquellos que, según entiende el personaje en cuestión, intentan discutir o rebatir “lo que dicen las Escrituras”, cuando eso no es más que una afirmación deliberadamente tendenciosa para predisponer a su auditorio en mi contra y para nada ajustada a la verdad; porque lo que yo discuto no es lo que dicen las Escrituras, sino aquello que el Sr. Olcese nos afirma que estas dicen y que es algo muy distinto. Y como dicho “genio” de la teología me imputa una perversa mala intención de intentar “destruir” con mis objeciones, la obra de “edificación” que él intenta desarrollar con sus disparatadas enseñanzas sobre “el respetable” que le sigue, veamos lo que tienen de destructivas las siguientes cuestiones y que recién se las había planteado en un exhaustivo artículo publicado el 23/06/14 y que ante la imposibilidad de respondérmelas, se ha acogido y como ya he señalado, a la excusa de la zorra que cuando no puede alcanzar el fruto, dice que está verde.

Y es que el Sr. Olcese continúa manteniendo con firmeza, la idea de que los sobrevivientes de la “gran tribulación” reinarán en el milenio al lado de Cristo y por lo que yo solo le emplazo, a que nos explique lo siguiente ¿cómo puede ser esto así, si los que ocuparán dicho cargo son solo aquellos que participan de la llamada “primera” resurrección de Rev. 20:6 y que es la que lleva a uno a reinar en el gobierno milenario como inmortal rey y sacerdote? Pero veamos cómo nos expone esto el pasaje mencionado:

Feliz y santo es cualquiera que tiene parte en la primera resurrección; sobre estos la muerte segunda no tiene autoridad, sino que serán sacerdotes de Dios y del Cristo y reinarán con él por los mil años.”

Porque según el registro escritural, esta se produce al final de la primera mitad de la profética semana 70 de Dan. 9:27 y coincidente con la muerte de los “dos testigos” de Rev. 11:3; 7 y siempre según se deduce de lo que nos cuenta Pablo en 1 Tes. 4:16-17…… sin embargo, resulta que la “gran muchedumbre” aparece cuando finaliza la “gran tribulación”, pues se nos dice que “salen de ella” (Rev. 7:14), eso es, tres años y medio después de ocurrida dicha “primera” resurrección y por lo que es obvio, que no pueden participar de ella y argumento que entiende hasta el más tonto de la clase. Ahora bien, querido lector ¿le parece a usted que esa pregunta intenta “destruir lo que dicen las Escrituras”, según el Sr. Olcese esgrime en un burdo intento de justificar el que no haya podido responder a dicha cuestión, o más bien señala a una flagrante contradicción en la enseñanza propuesta por dicho personaje? Luego es obvio, que nos encontramos ante lo que no es más que una simple argucia por parte del Sr. Olcese, para salirse por la tangente y “escurrir el bulto” y así no tener que reconocer que está totalmente equivocado en cuanto a esta enseñanza; pero dicho lo cual, veamos otra de mis objeciones y que también, según el personaje cuestionado, atenta contra el contenido escritural.

Y es que dicho “entendido” nos jura y perjura que en ningún lugar de las Escrituras se nos dice que sean solo 144.000 individuos aquellos que reinan con Cristo en el milenio…… y lo que un servidor hace, no es más que plantearle la siguiente pregunta: si ello es así ¿nos podría explicar, entonces, que significa lo que se leemos en Rev. 14:1 y siempre a la luz, de lo que se nos dice en el Sal. 2:5-6? Por lo que de nuevo les pregunto a ustedes ¿entienden que esta es una cuestión que intente “destruir” algo, o más bien un correcto deseo de que se dé cumplida explicación sobre una tesis que yo no comparto?…… porque a mí entender, la actitud del Sr. Olcese de excusarse en no contestar a esta nueva objeción, no es más que el fiel reflejo de la imposibilidad de poderlo hacer y salirse del follón en el que por su ignorancia supina se ha metido, al hacer tan peregrina afirmación. Permítanme que le recuerde a ese indocto, que lo mismo hizo a lo largo de casi tres años, cuando le rebatía la rocambolesca “enseñanza” de que “millones, miles de millones” reinarían con Cristo en el milenio hasta que forzado por la realidad, tuvo que reconocer, no solo que estaba equivocado en su planteamiento, sino que él no sabía si ello era así y que las Escrituras no decían nada de ello…… sin embargo, lo estuvo enseñando por casi tres años y con un gran despliegue de textos bíblicos como apoyo de semejante majadería.

Pero veamos otra cuestión y en la que el Sr. Olcese se ha reafirmado en su video del 07/07/14, en el sentido de que el rey David, así como resto de notables del AT, eso es, los Abraham, Isaac, Jacob, Moisés, etc. etc. etc. también participarían de la gobernación del reino de Dios en calidad de inmortales reyes y sacerdotes y “enseñanza” que de forma reiterada le ha sido rebatida desde este blog, sin que nunca haya sido capaz de contrarrestar mis argumentos en contra de semejante disparate…… empezando por no ser capaz de explicarnos el significado del Sal. 45:16:

En lugar de tus antepasados (o “padres” según versiones) llegará a haber tus hijos, a quienes nombrarás príncipes en toda la tierra.” (Acotación mía).

Dada la situación, lo que un servidor hace es plantear la siguiente “destructiva” pregunta: si los que reinarán en el milenio, ya se levantan en la “primera” resurrección con la condición de inmortales reyes y sacerdotes ¿porque razón estos personajes mencionados o antepasados de Jesús, tienen que “ser nombrados” algo, en este caso “príncipes en toda la tierra”? Ello solo puede deberse a que no han participado de ese mencionada “primera” resurrección y que es la que concede la inmortalidad y el poder reinar junto a Cristo en el milenio, por lo que no pueden participar en dicho gobierno; pero fijémonos además, que dichos personajes reciben el nombramiento de “príncipes” pero no el de “sacerdotes”, condición indispensable que deben de tener aquellos que reinan con Cristo y lo que vemos acudiendo de nuevo a Rev. 20:6:

Feliz y santo es cualquiera que tiene parte en la primera resurrección; sobre estos la muerte segunda no tiene autoridad, sino que serán sacerdotes (ver Gén. 19:6) de Dios y del Cristo y reinarán con él por los mil años.” (Rev. 20:6). (Acotación mía).

Luego solo la lógica y el sentido común nos dicen, que no podríamos estar hablando de esos antepasados de Jesús, como de personas que puedan reinar con él…… y esa es la cuestión que le he planteado al Sr. Olcese y que aún es el momento que se haya dignado a responderme; pero es que resulta que hay más argumentos bíblicos que nos muestran que esos personajes del AT no reinarán con Jesucristo y ello en línea con lo afirmado “tercamente” desde este blog, siempre respetando el texto escritural y como tengo por costumbre (servidor y a diferencia de lo que hace el Sr. Olcese, sí respeto y me ciño al texto sagrado), porque veamos lo que dijo Jesús en su momento:

Pero desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos es la meta hacia la cual se adelantan con ardor los hombres y los que se adelantan con ardor, se asen de él.” (Mat. 11:12).

Y siendo cierto que hay versiones que difieren de contenido, pues algunas traducen algo parecido a “el reino sufrió violencia y los violentos se apoderan de él”, no es menos cierto que todas están de acuerdo en que sea lo que sea que ocurriera con respecto del reino de Dios, ello tuvo un punto de partida en la corriente del tiempo y que inició a partir de la aparición de Juan “el bautizante” en adelante. Por lo que es del todo punto imposible, que personajes que vivieron antes de ese momento en que inició la carrera por el reino y por decirlo de alguna manera, pudieran tener acceso al mismo…… es más, ni siquiera el propio Juan pudo disfrutar de dicho privilegio, pues murió antes de que se abriera el acceso al mismo mediante el bautismo en espíritu santo y que fue derramado por primera vez sobre los apóstoles en Pentecostés de 33 E.C. y, circunstancia, que ya había señalado el propio Jesús con estas palabras:

En verdad les digo: Entre los nacidos de mujer no ha sido levantado uno mayor que Juan el Bautista; más el que sea de los menores en el reino de los cielos, es mayor que él.” (Mat. 11:11).

Y pasaje que en la versión TLA, se vierte de la siguiente manera y que complementa el sentido de lo que quiso decir Jesús con sus palabras:

Les aseguro que todavía no ha nacido un hombre más importante que Juan el Bautista. Pero en el reino de Dios, la persona menos importante es superior a Juan.”

Luego si razonamos con un poco de lógica y sentido común sobre esta afirmación del Hijo de Dios (y eso es lo que él dijo), lo que vemos es lo siguiente: si resulta que el menor o más pequeño en orden de importancia de los que participarían en la gobernación del reino de Dios, ya era mayor que Juan, es del todo punto imposible que este pudiera estar entre ellos y ciñéndonos siempre a lo que leemos en el contenido escritural. Pero claro, resulta que esta idea nos abre una derivada y que también nos muestra que los personajes del AT señalados por el Sr. Olcese, eso es, los Abraham, David, etc. de ninguna manera puede formar parte de dicho gobierno, porque veamos: si Juan era, según Jesús, el mayor o más importante de entre los “nacidos de mujer”, tenía que ser obviamente mayor que esos personajes del AT y que el Sr. Olcese coloca en la gobernación del reino de Dios…… entonces si siendo él mayor o más importante que estos, no podía contarse entre los gobernantes del reino ¿cómo lo podían hacer esas personas que, según Jesús (repito), eran “menores” en cuanto a importancia que el mencionado Juan? Pero veamos otra cosa que nos dijo Jesús y que de nuevo nos muestra que dichos personajes no pueden reinar con Cristo, que se lee en el siguiente y revelador pasaje:

En respuesta, Jesús le dijo: “Muy verdaderamente te digo: A menos que uno nazca de nuevo, no puede ver el reino de Dios”. 4 Nicodemo le dijo: “¿Cómo puede nacer el hombre cuando es viejo? No puede entrar en la matriz de su madre por segunda vez y nacer, ¿verdad?”. 5 Jesús contestó: “Muy verdaderamente te digo: A menos que uno nazca del agua (bautismo de agua) y del espíritu (bautismo en espíritu santo), no puede entrar en el reino de Dios.” (Juan 5:3-5). (Acotaciones mías).

Y es revelador porque nos muestra que para acceder al reino de Dios en calidad de inmortal rey y sacerdote, uno tenía que haber recibido los dos bautismos mencionados: el bautismo en agua y el bautismo en espíritu santo…… eso es, al menos, lo que se deduce del pasaje en cuestión; y aquí ya nos topamos con el primer problema, pues el primero de esos dos bautismos solo se empezó a impartir en el momento en que Juan “el bautizante” (de ahí, el sobrenombre) empezó su ministerio:

Ni siquiera yo lo conocía, pero El Mismo que me envió a bautizar en agua me dijo: “Sobre quienquiera que veas el espíritu descender y permanecer, este es el que bautiza en espíritu santo”.” (Juan 1:33).

Eso es, que dicho bautismo de agua no existía en tiempos precristianos y por lo que esos personajes mencionados por el Sr. Olcese, los Abraham y compañía, no lo podían haber recibido…… pero es que el pasaje mencionado también nos dice otra cosa del segundo de esos bautismos: el único que podía bautizar en espíritu santo era Jesús y algo que solo pudo hacer después de muerto y resucitado:

Y estando reunido con ellos, les dio las órdenes: “No se retiren de Jerusalén, sino sigan esperando lo que el Padre ha prometido, acerca de lo cual oyeron de mí; 5 porque Juan, en verdad, bautizó con agua, pero ustedes serán bautizados en espíritu santo no muchos días después de esto”.” (Hech. 1:4-5).

Queda claro entonces que esos notables del AT tampoco pudieron recibir este segundo bautismo, por lo que no reunían esos dos requisitos y sin los cuales era totalmente imposible, en palabras del propio Hijo de Dios y que ya hemos leído, entrar en el reino de Dios, pues recordemos que lo que dijo fue que “a menos” que se estuviera en posesión de los dos bautismos “no se podía” entrar en dicho reino…… y esos personajes del AT, habían muerto siglos antes de que se instituyeran dichos bautismo; pero es que aún tenemos un argumento más, que prueba mi afirmación en el sentido de que los Abraham y compañía no pueden de ninguna manera gobernar con Cristo en el reino de Dios, porque veamos: según se lee en Rev. 20:4 solo alcanzan dicho privilegio, aquellos que hubieran muerto asesinados en defensa de su fe:

Y vi tronos y hubo quienes se sentaron en ellos y se les dio poder para juzgar. Sí, vi las almas de los que fueron ejecutados con hacha (eso es, muertos violentamente) por el testimonio que dieron de Jesús y por hablar acerca de Dios y los que no habían adorado ni a la bestia salvaje ni a su imagen y que no habían recibido la marca sobre la frente ni sobre la mano. Y llegaron a vivir y reinaron con el Cristo por mil años.” (Acotación mía).

Que ello es así, queda determinado por lo que les dijo Jesucristo a esas personas en Rev. 2:10 y en dónde se lee como sigue:

No tengas miedo de las cosas que estás para sufrir. ¡Mira! El Diablo seguirá echando a algunos de ustedes en la prisión para que sean puestos a prueba plenamente y para que tengan tribulación diez días. Pruébate fiel hasta la misma muerte y yo te daré la corona de la vida.”

Entonces es obvio y por el contenido de ambos pasajes, que el requisito o condición indispensable era permanecer fiel hasta la misma muerte, si se quería alcanzar la “corona de la vida” y lo que cuadraría perfectamente, con lo que se lee en Rev. 6:9-11:

Y cuando abrió el quinto sello, vi debajo del altar las almas de los que habían sido degollados a causa de la palabra de Dios y a causa de la obra de testimonio que solían tener. 10 Y clamaban con voz fuerte y decían: “¿Hasta cuándo, Señor Soberano santo y verdadero, te abstienes de juzgar y de vengar nuestra sangre en los que moran en la tierra?”. 11 Y a cada uno de ellos se dio una larga ropa blanca; y se les dijo que descansaran por un poco de tiempo más, hasta que se completara también el número de sus coesclavos y de sus hermanos que estaban a punto de ser muertos como ellos también lo habían sido (eso es, también asesinados por su lealtad a Dios).” (Acotación mía).

Luego nada que objetar a que solo acceden a la gobernación del reino, aquellos que han ofrecido su vida en sacrificio o muerte de martirio; ahora bien, quedando eso perfectamente aclarado…… ¿cómo murieron, la mayoría de esos personajes del AT y de los que el Sr. Olcese nos dice que reinarán con Cristo? Veámoslo:

Gén. 25:7-8: “Y estos son los días de los años de la vida de Abrahán que él vivió: ciento setenta y cinco años. 8 Entonces expiró Abrahán y murió en buena vejez, viejo y satisfecho y fue recogido a su pueblo.”

Gén. 35:28-29: “Y los días de Isaac ascendieron a ciento ochenta años. 29 Después Isaac expiró y murió y fue recogido a su pueblo, viejo y satisfecho de días y Esaú y Jacob, sus hijos, lo enterraron.”

Gén. 47:27-28; 49:33: “E Israel continuó morando en la tierra de Egipto, en la tierra de Gosén; y quedaron establecidos en ella y fueron fructíferos y llegaron a ser muchísimos. 28 Y Jacob siguió viviendo en la tierra de Egipto diecisiete años, de modo que los días de Jacob, los años de su vida, llegaron a ser ciento cuarenta y siete años (……) Así acabó Jacob de dar mandatos a sus hijos. Entonces recogió los pies en el lecho y expiró y fue recogido a su pueblo.”

1 Crón. 29:26-28: “En cuanto a David hijo de Jesé, reinó sobre todo Israel; 27 y los días que él reinó sobre Israel fueron cuarenta años. En Hebrón reinó por siete años y en Jerusalén reinó por treinta y tres años. 28 Y por fin murió en buena vejez, satisfecho de días, riquezas y gloria; y Salomón su hijo empezó a reinar en lugar de él.”

Gén. 9:28-29: “Y Noé continuó viviendo trescientos cincuenta años después del diluvio. 29 De modo que todos los días de Noé ascendieron a novecientos cincuenta años y murió (obviamente, también de muerte natural).” (Acotación mía).

Job 42:16-17: “Y después de esto Job continuó viviendo ciento cuarenta años y llegó a ver a sus hijos y sus nietos... cuatro generaciones. 17 Y gradualmente murió Job, viejo y satisfecho de días.”

Y así podríamos hablar de Moisés, José y tantísimos otros personajes ilustres del AT, que de ningún modo sufrieron muerte violenta por defender su fe, eso es “por el testimonio que dieron de Jesús y por hablar acerca de Dios” según Rev. 20:4 y que ya hemos leído…… en definitiva que murieron en la cama; luego está claro que dichos personajes no pueden estar entre aquellos que claman venganza por su sangre a Dios y de lo que nos habla el pasaje mencionado de Rev. 6:9-11. Luego blanco y en botella: a menos que violentemos brutalmente el registro de las Escrituras, esos personajes del AT no reunían los requisitos imprescindibles exigidos en las mismas para entrar en el reino en calidad de inmortales reyes y sacerdotes y sin los cuales, quedaban fuera de dicho gobierno y por lo que solo podían ser súbditos del mismo…… súbditos cualificados, eso sí, pues muchos de ellos serán nombrados príncipes (Sal. 45:16), pero súbditos al fin y al cabo y diga lo que diga el indocumentado del Sr. Olcese, Por lo que de nuevo les emplazo, queridos lectores, a que me digan que hay de “destructivo” y de “mala intención” en estas objeciones presentadas y sustentadas (como tengo por costumbre) en textos bíblicos fuera de toda duda; entonces ¿qué es lo que en realidad ocurre?

Pues que el Sr Olcese, que es un ignorante patológico, no puede responder a mis objeciones de manera razonable y de ahí que se excuse diciendo que no vale la pena razonar con alguien que solo tiene la intención de “discutir por discutir” y de “destruir”…… cuando lo que un servidor hace es poner negro sobre blanco o viceversa (como ustedes prefieran), para que sea la verdad contenida en las Escrituras la que prevalezca y aquellos que visiten este blog se beneficien de ello; por lo que contrario a lo que dice ese señor, lejos de hacer gala de una malsana intención en querer “destruir”, lo que pretendo es edificar a aquellos que han sido engañados por esas disparatadas “enseñanzas” propugnadas por tan nefasto personaje y otros de su misma “calaña”. De hecho, no son pocos los lectores que me han llegado rebotados del blog de Apologista hasta esta página e incluso, siendo muchos los seguidores del personaje referido que también me leen y algo que confirma él mismo dicho extremo, al asegurar “que muchos de sus seguidores”, le preguntan por qué no responde a mis objeciones…… ¡luego cómo estará la cosa, que ha tenido que salir al paso de ello con el video mencionado!

Y es que dicho “caballero” cuenta sus enseñanzas por disparates, pues veamos lo que nos acaba de decir, en una grabación publicada en su blog el 27/06/14, en el sentido de que Adán y Eva sí estarán en el venidero reino de Dios y ello, textualmente (minuto 1-1’13 de grabación), porque ambos fueron “salvados por su fe” y lo cual es una solemne majadería, fruto de un total desconocimiento de lo que nos dicen las Escrituras o de una empanada mental de esas de “agárrate y no te menees”, pues estos personajes y ya de entrada, no tenían por qué tener fe…… al menos, la fe de la que se nos habla en las Escrituras:

Fe es la expectativa segura de las cosas que se esperan, la demostración evidente de realidades aunque no se contemplen.” (Heb. 11:1).

Por lo que Adán y Eva no podían tener esta fe, pues ellos ya eran depositarios de esa “realidad” que nosotros esperamos en virtud de la sangre derramada de Cristo y que nos tiene que devolver a esa forma de vida de la que disfrutaban ambos personajes, eso es, una vida sin la mancha del pecado que acarrea la muerte o, como dijo Pablo, de “la vida que realmente lo es” (1 Tim. 6:19) y que equivale a una vida de duración indefinida…… y repito para énfasis: ellos ya vivían esa realidad que nosotros esperamos en virtud de la sangre de Cristo y por lo que no precisaban de la fe. Pero claro, resulta que ese disparate que acaba de afirmar el Sr. Olcese con respecto de Adán y Eva, se convierte en una solemne salvajada cuando lo contemplamos a la luz de otra de sus “geniales” enseñanzas y que tiene que ver con la resurrección; porque recordemos que según nos cuenta ese “genio” de la teología, hay una resurrección al principio del milenio en la que participan todos aquellos “justos” que son salvos y para reinar con Cristo y otra para el final del mismo, en la que participan los “injustos” para juicio o destrucción eterna y apoyándose para ello en una disparatada interpretación de Hech. 24:15. Entonces, si nuestros primeros padres resulta que son “salvados por su fe” y eso es lo que nos acaba de decir ese indocumentado, nos encontramos con la siguiente paradoja: que a los culpables directos de miles de años de sufrimiento, muerte, dolor y amargura del ser humano sobre la tierra, Jehová los “recompensa” con el participar en calidad de inmortales reyes y sacerdotes precisamente junto al que Él tuvo que dar en brutal sacrificio (a Su Hijo Jesucristo) para recobrar lo que ellos habían perdido…… o sea y ya me disculpará el Sr. Olcese, pero estamos ante una animalada más propia de un descerebrado, que de un teólogo.

Pero claro, resulta que por aquello de que “para que falte, más vale que sobre”, la cosa no acaba aquí, porque si lo que nos dice el “teólogo” en cuestión fuera cierto, eso es, que tanto Adán como Eva fueron “salvados por su fe”, ello les llevaría a ambos a participar en la primera de las dos resurrecciones propuestas por dicho “caballero” y en consecuencia, a reinar con Cristo durante el milenio…… solo que aparece un pequeño problema y que tiene que ver con otra afirmación que ese rocambolesco personaje publicó el 20/04/13 en el sentido de que aquellos que tienen que reinar con Cristo solo pueden ser varones y apoyándose para ello en el pasaje de Rev. 14:4:

Estos son los que no se contaminaron con mujeres; de hecho, son vírgenes. Estos son los que van siguiendo al Cordero no importa adónde vaya. Estos fueron comprados de entre la humanidad como primicias para Dios y para el Cordero.”

Y siendo cierto que en su congénita ignorancia nos hace una pésima aplicación de esas palabras, pues ahí no se nos habla de mujeres literales, sino de organizaciones religiosas, no es menos cierto que usó dicho pasaje para “demostrar” que los 144.000 tienen que ser varones; luego si ello es así como como nos afirma ¿dónde metemos a una Eva “salvada por su fe”, que en ningún caso podría participar de esa primera resurrección que nos plantea, preparada solo para aquellos que tienen que reinar con Jesucristo y algo que esta no puede hacer por ser una mujer, teniendo en cuenta que solo nos queda una segunda resurrección para juicio o destrucción eterna de los que en ella participen…… siempre, claro está, según lo que nos cuenta ese indocumentado? Excuso decir, que en este video y analizado con atención, hay un implícito reconocimiento de que aquellos que tienen que participar de ese gobierno del reino son un grupo de solo 144.000 individuos y no uno compuesto de una inmensa cantidad de personas, como absurdamente propone tan indocto personaje…… no es menos cierto que dado que no sabe ni de lo que habla, probablemente no se haya dado cuenta de ello.

Tan indocto, que en una infecta perorata contenida en un video posterior y publicado el 27/06/14, nos decía más o menos lo siguiente (minuto 10 en adelante): para que los hombres amaran a Dios, era “necesario” que la primera pareja cayera en el pecado, pues ya en los planes de Dios se contemplaba el que Adán y Eva tenían que pecar, para poder así “demostrarle” Dios al hombre su gran amor hacia este, al dar a Su Hijo como rescate; luego lo que realmente nos está planteando ese indocumentado, es que Jehová es el responsable último del sufrimiento, dolor y amargura que ha existido en la tierra por milenios (pues ello y según nos da a entender ese “zumbao”, formaba parte de un plan divino), así como el brutal sufrimiento de Su Hijo y todo, para que la humanidad “se enterara” de cuanto nos ama Dios…… y ya me disculparán ustedes ¡pero ya hay que ser salvaje, para plantear semejante disparate! Según nos afirma a continuación y habría que pensar, que en un despliegue de sus “amplios” conocimientos teológicos, esta es la “única explicación” que hay sobre lo ocurrido con nuestros primeros padres, pero afirmación que no cuadra con lo que el Altísimo le dijo al primer ser humano:

Y también impuso Jehová Dios este mandato al hombre: “De todo árbol del jardín puedes comer hasta quedar satisfecho. 17 Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, no debes comer de él, porque en el día que comas de él, positivamente morirás”.” (Gén. 2:16-17).

Palabras que denotan claramente que el plan de Dios no tenía nada que ver con el que la primera pareja humana pecara y de ahí dicha advertencia; porque si ello fuera como nos lo propone el Sr. Olcese, estaríamos ante una actitud hipócrita de Dios con la finalidad de proporcionarse una coartada, eso es, un poder decir en su momento “yo ya les advertí y no me hicieron caso”…… y resumiendo, queridos amigos que me leen, esta es la “capacidad intelectual” del personaje en cuestión, que afirma que no responde a mis objeciones porque no merece la pena perder su tiempo con una persona tan “mal intencionada” como un servidor, guiada por razones puramente “destructivas” en sus planteamientos (eso es, que al igual que la zorra del título de este escrito, cuando no puede dice que “están verdes”); y que para justificar su actitud, me aplica las palabras de Mat. 7:6:

No den lo santo a los perros, ni tiren sus perlas delante de los cerdos, para que nunca las huellen bajo los pies y, volviéndose, los despedacen a ustedes.”

Claro, visto cómo se revuelve dicho personaje cuando se le interpela y no es capaz de dar una mínima respuesta a la cuestión que se le plantea, la pregunta es solo obligada: ¿quién es el que en esta ocasión, está ocupando el lugar del cerdo mencionado por Jesús?

Armando López Golart

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