jueves, 29 de octubre de 2015

La “parábola” de los viñadores.


Decir de entrada, que en cierto modo nos incomodan los correos de aquellos que no se identifican adecuadamente y ventilan la cuestión firmando con un escueto “anónimo”, lo que nos lleva a no responder a ninguno de ellos; pero como en esta ocasión la pregunta que nos hace nuestro anónimo comunicante, tiene mucho sentido y nos permite el poder complementar la información que dábamos en nuestro escrito del 18/10/15, aún a regañadientes vamos a responder al tema que se nos propone…… pero antes de entrar en materia, permítannos agradecer a nuestro anónimo comunicante (lo cortés, no quita lo valiente), el hecho de que nos lea y que de forma tan rápida nos haya informado de su inquietud, pues su correo llegó unas pocas horas después de publicado nuestro artículo. Lo que nos lleva a pensar que bien podría tratarse de un miembro en activo de la organización de los Testigos de Jehová, pues la cuestión planteada no es de las que puedan intrigar a personas que no se muevan dentro de ese ámbito y por lo que enfocaremos nuestra respuesta desde esa perspectiva; dicho lo cual, pasamos a mostrarles el contenido del correo en cuestión y como tenemos por costumbre, transcrito tal cual nos ha llegado, eso es, sin retoque alguno:

Anónimo ha dejado un nuevo comentario en su entrada "Pero…… ¿a quién sirven realmente, los miembros activos de los Testigos de Jehová?":

Entonces, para usted, ¿qué es servir a Jehová en la actualidad? En el primer siglo, los cristianos estaban organizados en congregaciones con ancianos dirigiendolas. Unos pocos dirigiendo a muchos. Osea había una estructura organizada. Los cristianos no andaban por la libre. Ese es el modelo que copian los testigos de Jehová.”

Y nos quedamos en principio con el pensamiento final, en el sentido de que estamos ante una “copia” que los Testigos de Jehová hacen del modelo original y asunto del que nosotros para nada entrábamos a discutir en nuestro escrito, pues es este un extremo que damos por sentado y asimilado por los más de 30 años de militancia en dicha organización, de cada uno de los dos autores de este blog: los Testigos de Jehová usan la misma forma de estructura de la primitiva organización cristiana. Por lo que la cuestión que plantearemos en este escrito, no es tanto el que estemos ante una “copia” de lo que ocurrió en el primer siglo de nuestra era, sino lo idóneo de dicha “copia” y que no parece ser el caso, porque veamos: la estructura copiada estaba dirigida por personas “ungidas” por el espíritu santo de Dios y que demostraban dicha condición a cada paso que daban, mediante las poderosas obras que se les permitía llevar a cabo y que hacían las veces de señal identificadora de ser uno realmente una persona “enviada” por Dios…… sin embargo, este no es el caso en la actualidad y con lo que estaríamos hablando de una “copia” deficiente, cuando no falsa; sobre todo, si nos ceñimos a lo dicho por el propio Jesucristo en el momento de comisionar a sus más directos seguidores y ello momentos antes de ser elevado a los cielos:

Y les dijo: “Vayan por todo el mundo y prediquen las buenas nuevas a toda la creación. 16 El que crea y sea bautizado será salvo, más el que no crea será condenado. 17 Además, estas señales acompañarán a los que crean: Mediante el uso de mi nombre expulsarán demonios, hablarán en lenguas, 18 y con las manos tomarán serpientes, y si beben algo mortífero no les hará ningún daño. Pondrán las manos sobre los enfermos y estos sanarán”.

19 Entonces el Señor Jesús, después de haberles hablado, fue tomado arriba al cielo y se sentó a la diestra de Dios. 20 Por consiguiente, ellos salieron y predicaron por todas partes, mientras el Señor obraba con ellos y apoyaba el mensaje por las señales que acompañaban a este.” (Mar. 16:15-20).

Luego si los Testigos de Jehová (como organización) fueran y como se identifican a sí mismos, los “continuadores” de esa estructura primitiva ¿por qué no se cumple lo leído con ellos? Cuestión esta que nos pone ante dos alternativas: si esas señales no les “acompañan” en su obra actual, es porque, o bien no han creído o bien porque no son los verdaderos continuadores de la obra del primer siglo y por mucho que copien su formato. Pero es que además y cuestión que parece indicar que no vamos por mal camino al situarnos en dicha tesitura, resulta que tenemos otra circunstancia que se levanta en contra de la autenticidad de esa organización como “continuadora” de la obra de los primeros seguidores de Jesucristo…… porque si en el I siglo Jesucristo apoyaba la obra mediante las señales que acompañaban a esta ¿por qué no la continúa apoyando ahora mediante dichas señales, si esta es una “continuación” de la primera? Y solo se nos ocurre una respuesta lógica: los Testigos de Jehová están llevando a cabo una obra que nada tiene que ver con la que se hizo por los apóstoles de Jesús y posteriores seguidores de estos (Juan 17:20); lo que nos lleva a la siguiente cuestión y que tiene que ver con la pregunta formulada, en el sentido de qué es servir a Jehová en la actualidad y lo que pude ser respondida por otra pregunta ¿cómo puede uno servir a otro, si no ha sido “contratado” para ello?

Tenemos en las Escrituras, de las muchas ilustraciones (o “parábolas) que usó Jesús para enseñar (Mat. 13:34) y que se conoce como la “parábola de los viñadores”, en la que nos habla de un amo de casa, propietario de una viña, que en el momento álgido de la vendimia o recogida de la uva y que no se puede demorar (de ahí que el amo de la viña y según las circunstancias, tuviera que ir ampliando el número de asalariados), salió a distintas horas del día a contratar a algunos obreros para trabajar en la misma y sin embargo, a todos pagó igual salario; dicha ilustración (o “parábola”), la encontramos en Mat. 20:1-16 y dice así:

Porque el reino de los cielos es semejante a un hombre, un amo de casa, que salió muy de mañana para contratar obreros para su viña. 2 Cuando hubo convenido con los obreros en un denario al día, los envió a su viña. 3 Saliendo también cerca de la hora tercera, vio a otros que estaban de pie desocupados en la plaza del mercado; 4 y a aquellos dijo: “Ustedes también, vayan a la viña y les daré lo que sea justo”. 5 De modo que ellos se fueron. Él volvió a salir cerca de la hora sexta y de la nona, e hizo lo mismo. 6 Finalmente, salió cerca de la hora undécima y halló a otros de pie y les dijo: “¿Por qué han estado de pie aquí desocupados todo el día?”. 7 Le dijeron: “Porque nadie nos ha contratado”. Les dijo: “Ustedes también vayan a la viña”.

8 Cuando empezó a anochecer, el amo de la viña dijo a su encargado: “Llama a los obreros y págales su salario, procediendo desde los últimos hasta los primeros”. 9 Cuando vinieron los hombres de la hora undécima, recibieron cada uno un denario. 10 Por eso, cuando vinieron los primeros, concluyeron que ellos recibirían más; pero ellos también recibieron pago a razón de un denario. 11 Al recibirlo, se pusieron a murmurar contra el amo de casa 12 y dijeron: “¡Estos últimos trabajaron una sola hora; no obstante, los hiciste iguales a nosotros que soportamos el peso del día y el calor ardiente!”. 13 Mas él, respondiendo a uno de ellos, dijo: “Amigo, no te hago ningún mal. Conviniste conmigo por un denario, ¿no es verdad? 14 Toma lo tuyo y vete. Quiero dar a este último lo mismo que a ti. 15 ¿No me es lícito hacer lo que quiero con mis propias cosas? ¿O es inicuo tu ojo porque yo soy bueno?”. 16 De esta manera los últimos serán primeros y, los primeros, últimos.”

Y siendo cierto que alguien podría pensar, que este relato no tiene mucho que ver con lo que estábamos hablando, la realidad es muy distinta; no podemos olvidar que estamos ante una “parábola” y por tanto, de un hecho figurado o ficticio del que se pueden entresacar diversas enseñanzas, algunas de las cuales bien pueden no aplicar concretamente al tema para la cual fue dicha…… pero que continúan siendo “principios” para aquellos que estudiamos las Escrituras. Partiendo de esta premisa, tenemos que el sentido último de dicho relato tiene que ver con los “ungidos” o aquellos que tienen que reinar con Cristo y que resumiendo al máximo lo que Jesús pretendía decir, tendríamos lo siguiente: mientras los del I siglo trabajaron por 30 o 40 años en la obra encomendada por Jesús y con todo lo que de sufrimiento, persecución o penalidades asociadas significaba ello, los “dos testigos” de Rev. 11:3 (resto “ungido” aún por aparecer) solo lo harán por espacio de tres años y medio o 1.260 días…… sin embargo, todos reciben el mismo “salario”: ser investidos por igual y en el momento de su resurrección, como inmortales reyes y sacerdotes al lado del Hijo de Dios. Pero a su vez, nos encontramos en dicha “parábola” con otra enseñanza y que como “principio” suele pasar desapercibida, como es el que para trabajar en la “viña” de Dios, necesitamos ser “contratados” por Este…… de ahí, quizás, estas palabras de Jesús y que sin dicha premisa no se entenderían:

Más sepan una cosa, que si el amo de casa hubiera sabido en qué vigilia habría de venir el ladrón, se habría quedado despierto y no habría permitido que forzaran su casa. 44 Por este motivo, ustedes también demuestren estar listos (o preparados, según versiones), porque a una hora que no piensan que es, viene el Hijo del hombre.” (Mat. 24:43-44). (Acotación nuestra).

Luego…… “listos” ¿para qué? Obviamente listos para ser “contratados” en la gran “vendimia” que se aproxima y de la que se nos habla en la “parábola de las ovejas y las cabras” (Mat. 25:31-46), que liderarán esos mencionados “dos testigos” de Rev. 11:3 por un tiempo limitado de 1.260 días y en cumplimiento de lo señalado por Jesús en Mat. 24:14; porque en dicha parábola y de la que en no pocas ocasiones les hemos hablado, se nos explica que se ofrecerá a toda persona la oportunidad de ser “contratada” para ayudar a esos enviados de Dios en la tarea que les ha sido encomendada, en este caso el de separar el “trigo de la mala hierba” (Mat. 13:24-30) y separación que se llevará a cabo mediante la predicación anunciada…… de la respuesta que cada uno dé a dicha oferta, dependerá que sea colocado a la derecha del rey de la “parábola” mencionada para vida eterna o, en su defecto, a su izquierda y para destrucción eterna (Mat. 25:46).

Y esta es toda la historia…… por lo tanto mientras no aparezcan en escena esos “enviados” de Dios y que demuestran dicha condición (a la manera de los apóstoles), por los súper poderes de los que han sido dotados (Rev. 11:5-6) y en línea con lo dicho por Jesús en Mar. 16:17-18, resulta que nadie actualmente puede estar “sirviendo” a Dios, pues aún no ha sido “contratado” para ello. Luego todos aquellos que como los supuestos “ungidos” de los Testigos de Jehová, se arrogan la presunción de hablar en “nombre” de Dios, por tanto sus directos y únicos representantes en la tierra, les aplican las siguientes palabras:

Sin embargo, el profeta que tenga la presunción de hablar en mi nombre una palabra que yo no le haya mandado hablar, o que hable en el nombre de otros dioses, ese profeta tiene que morir. 21 Y en caso de que digas en tu corazón: “¿Cómo conoceremos la palabra que Jehová no ha hablado?”, 22 cuando hable el profeta en nombre de Jehová y la palabra no suceda ni se realice, esa es la palabra que Jehová no ha hablado. Con presunción la habló el profeta. No debes atemorizarte de él.” (Deut. 18:20-22).

Podríamos concluir entonces, que puesto que esos señores, de poderes “extraordinarios” nada de nada y que la mayoría de sus afirmaciones en cuanto a la venida del “fin del mundo”, se cuentan por fracasos, nada tienen que ver con una organización que tenga el favor de Dios, sino que más bien al contrario y como se describe en el versículo 20 del pasaje citado, como tal “merece morir”, eso es, ser destruida totalmente en su momento por ser una religión falsa e integrante por tanto, del imperio mundial de religión falsa y que en las Escrituras se identifica como “Babilonia la Grande, la madre de todas las rameras” (Rev. 17:5-6) y de la que el propio Jehová Dios, ordena “salirse”:

Y oí otra voz procedente del cielo decir: “Sálganse de ella, pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados y si no quieren recibir parte de sus plagas.” (Rev. 18:4).

Por lo que si usted está asociado a dicha organización y como parece ser el caso de nuestro anónimo comunicante ¡ya sabe lo que le toca…… salir “pitando” de ella, salvo que quiera incurrir en flagrante desobediencia al Dios que usted honestamente cree servir y con todo lo que ello acarrea! (Hebr. 10:31). Ahora bien…… ¿y mientras tanto ¡qué!? Pregunta que nos lleva a la cuestión que se nos planteaba en el correo señalado, en el sentido de ¿cómo se puede, mientras tanto, servir a nuestro Creador? Pues sencillamente, demostrando mantenerse “listo” como demandó Jesús y lo que no pasa por asociarse con organización religiosa alguna, sino por tener un profundo aprecio al regalo divino de las Escrituras y que no son otra cosa que el medio, a modo de carta personal, que en este momento usa Jehová Dios para ponernos en antecedentes de cómo piensa llevar las cosas para nuestro propio beneficio; si por el contrario, uno no muestra el aprecio señalado, porque es de los que piensa que la Biblia es un libro antiguo, por tanto desfasado en el tiempo actual y solo la tiene en una estantería de su comedor, para sacarle el polvo de vez en cuando, difícilmente se podrá enterar de nada y con lo que no estará preparado o “listo” en el momento oportuno…… extremos estos de los que se nos habla en el Sal. 1:1-6:

Feliz es el hombre que no ha andado en el consejo de los inicuos y en el camino de los pecadores no se ha parado y en el asiento de los burladores no se ha sentado. 2 Antes bien, su deleite está en la ley de Jehová y día y noche lee en su ley en voz baja. 3 Y ciertamente llegará a ser como un árbol plantado al lado de corrientes de agua, que da su propio fruto en su estación y cuyo follaje no se marchita y en todo lo que haga tendrá éxito.

4 Los inicuos no son así, sino que son como el tamo impelido por el viento. 5 Por eso los inicuos no se pondrán de pie en el juicio, ni los pecadores en la asamblea de los justos.

6 Porque Jehová va conociendo el camino de los justos, pero el mismísimo camino de los inicuos perecerá.”

En armonía con estas palabras y por seguir en lo que estábamos, lo que uno puede hacer para servir a Dios en estos tiempos y estar “listo” o preparado en el momento oportuno, pasaría por continuar leyendo este blog (por ejemplo) y contrastar lo que en el mismo se publica con lo dicho en las Escrituras (requisito indispensable para que la cosa funcione…… el contrastar con las Escrituras, no el leernos a nosotros precisamente) y así mantenerse activo en su estudio de estas y a la espera de que un día, ya muy cercano en el tiempo (¡podría ser mañana mismo!) alguien llame a su puerta y le diga “¡Ha llegado el momento…… ¿quiere usted “trabajar” en la viña del Señor?¡

MABEL


jueves, 22 de octubre de 2015

Pero…… ¿qué hay de los argumentos?


Porque veamos, Sr. Olcese: cuando uno entra a debatir determinada cuestión y sea cual sea el tema del que se trate, lo que se espera es que aporte la documentación pertinente que valide su discrepancia y cosa que usted nunca ha podido hacer, porque no es más que un pobre “botarate”, ignorante hasta las cachas y que se da ínfulas de “teólogo” porque cierto día le dieron un “papelito” que le acreditaba como tal…… pero que como decimos por estas “Españas” de nuestras entretelas “una cosa es predicar y la otra dar trigo”. Porque una cosa es tener un “papelito” colgado en la pared que diga que usted es esto, lo otro o lo de más allá y otra muy distinta, hacer honor a dicha condición; y es que resulta que usted, como siempre, ha hecho gala una vez más de su congénita ignorancia, al intentar de nuevo rebatir uno de mis planteamientos sin ser capaz de aportar uno alternativo, eso es, sin aportar argumentos que sustenten su objeción; ello lo ha hecho mediante un nuevo correo y en donde demuestra una vez más su supina incapacidad para razonar con un mínimo de lógica y sentido común…… ya hablar de entendimiento escritural y a tenor de lo que me ha mandado ¡vamos, es que ni por el forro! Pero veamos el correo de marras y en el que, repito, queda patente no solo su total desconocimiento del contenido escritural, sino de su tremenda incapacidad para leer con un mínimo de rigor:

apologista commented on ¿"ÁNGELES"...... O "MENSAJEROS"?

Armando, eso te pasa por haberle escuchado al "esclavo" de la Watchtower, y no haberte educado en una universidad oportunamente, institución que te hubiera ayudado a cultivar tu incipiente intelecto y tener un mejor raciocinio, como lo tienen los ingenieros, por ejemplo.
Cuando la Biblia dice que Jesús viene con sus santos, de hecho se refiere a los seres espirituales que están al servicio de Dios y Su Hijo. No son los ungidos, o los arrebatados antes o durante la grande tribulación como dicen algunos bobos por allí. De hecho, Jesús viene con sus ángeles inmediatamente DESPUES de la gran tribulación (Mateo 24:29,30) y luego mandará a sus ángeles a que hagan la separación de ovejas y cabras, y será en ese momento en que les dirá a las ovejas que están a su derecha (todos los salvos...incluidos los ungidos) Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. ¿Entiendes ahora, cerebrito oxidado? (Lee Mateo 25:31-34 que te callará la boca).
Tu servidor, Ingeniero Mario A Olcese (Diplomado en Teología).
Y por favor, no borres este comentario...¿o.k? ¡Vale!

En primer lugar, me tendría que aclarar qué es eso que supuestamente “me pasa a mí”, porque hasta dónde yo llego, lo que me pasa es que en cuanto a conocimiento bíblico le doy te tortas hasta en el carné de identidad; es cierto que un servidor no ha tenido estudios superiores de ningún tipo (lamentablemente, no había profesores de mi talla), pero visto el resultado que estos tienen en algunos “ingenieros” y “teólogos” como es en su caso ¡casi hasta me alegro, oiga! Porque sin tenerlos y encima, según usted, con un “estropicio” por cerebro (tal parece que a usted, hace tiempo que este le ha abandonado), resulta que apenas le conocí ya le hice “comerse con patatas” una de sus enseñanzas más señeras y mantenida por años, como era la de los “millones, miles de millones” que tenían que reinar con Cristo en el reino de Dios…… o sea y como diría mi amigo el castizo “¡menos lobos, caperucita!”.

Por otra parte, habida cuenta de las sandeces que usted afirma en dicho correo, sería un auténtico desperdicio el no publicarlo y con ello aumentar su descrédito, si es que ello es ya posible; luego no estaría de más el hacerle unas cuantas preguntas relacionadas con el tema, para que usted mismo se acabe de hundir en ese submundo de la ignorancia en el que vive de manera permanente, porque veamos: en Rev. 17:12-14, se nos explica que cuando Jesucristo pelea la batalla final de Har-magedón contra los reyes de la tierra le acompañan determinados personajes, pues en dicho pasaje y tomado de la versión bíblica que usted usa (la RV 1960), se lee como sigue:

Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia. 13 Estos (dichos reyes) tienen un mismo propósito y entregarán su poder y su autoridad a la bestia. 14 Pelearán contra el Cordero y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de señores y Rey de reyes; y los que están con él (obviamente, peleando dicha batalla y participando de la victoria) son llamados y elegidos y fieles.” (Acotaciones mías).

Entonces ¿por ventura nos podría explicar usted, quiénes son esos “llamados”, “elegidos” y “fieles”, que le acompañan en tan singular batalla final? Porque ya expliqué en el artículo al que usted responde y que por cierto, nada menciona de ello, que los ángeles podrán ser todo lo “fieles” que usted quiera, pero que de “llamados” o “elegidos” no tienen absolutamente nada; lo mismo ocurre, con otros aspectos de la cuestión y de los que quién lo desee se puede enterar, leyendo mi escrito publicado el 15/10/15 y a los que usted ni siquiera hace mención en el correo enviado. Pero veamos otra de sus “genialidades”: usted afirma y apoyándose para ello en el pasaje de Mat. 24:29-30, que Jesucristo regresa a la tierra después de ocurrida la “gran tribulación”…… pero veamos si lo que se nos dice en dicho pasaje, tiene algo que ver con lo que usted entiende del mismo, o es una cosa totalmente distinta; y para ello de nuevo usaremos su traducción favorita, la RV 1960:

E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor y las estrellas caerán del cielo y las potencias de los cielos serán conmovidas.
30 Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria.”

Note Sr. “teólogo” que en dicho pasaje no se habla para nada de la “gran tribulación” y como usted afirma, en una más que demostrada incapacidad para entender siquiera lo que lee, sino de la “tribulación de aquellos días” y que es algo totalmente distinto; porque la “tribulación” a la que se hace referencia en este pasaje, se explica en el pasaje paralelo de Luc. 21:25-27 y que dice así:

También, habrá señales en el sol y en la luna y en las estrellas y sobre la tierra angustia de naciones, por no conocer la salida a causa del bramido del mar y de su agitación, 26 mientras que los hombres desmayan por el temor y la expectación de las cosas que vienen sobre la tierra habitada; porque los poderes de los cielos serán sacudidos. 27 Y entonces (eso es, cuando confluyan esas dos circunstancias, señales en los astros y una grave situación sobre la tierra y en lo que coinciden ambos pasajes) verán al Hijo del hombre viniendo en una nube con poder y gran gloria.” (Acotación mía).

O sea, Sr. Olcese: que se nos está hablando de una desastrosa situación a nivel mundial y que llevamos padeciendo ya por varios años, agravada en tiempos recientes por el conflicto de Oriente Medio y situación que se corresponde con la citada “tribulación de aquellos días”, de Mat. 24:29; además, coincidente dicha tribulación o complicada situación en la tierra, con esas “señales” de las que se nos habla al inicio del pasaje leído y relacionadas por todos los autores bíblicos (me permito señalarle que usted y aunque yo se lo sugerí, no se ha pronunciado en cuanto a ello) con la tétrada de lunas rojas y los eclipses de Sol observados en los años 2.014 y 2.015 (coincidentes tales fenómenos estelares con celebraciones judías) y lo que nos sitúa ante una serie de señales conjuntas, que apuntarían (v. 27) al inminente regreso de Jesucristo a la tierra a partir de ocurridas estas…… por lo tanto, su afirmación en el sentido de que Jesucristo aparece inmediatamente después de la “gran tribulación” y que aún está en el futuro (primero tiene que producirse la predicación anunciada en Mat. 24:14), no es más que una mamarrachada de las suyas y por no tener ni puñetera idea de lo que lee, ni del contexto escritural, ni de los textos paralelos, ni nada que se le parezca.

Porque según Mat. 24:29-30, es después de la “tribulación de aquellos días” o grave situación por la que atraviesa la humanidad, según Luc. 21:25-27, cuando aparece la señal de la venida de Jesucristo y no después de la “gran tribulación” de la que se nos habla en Rev. 7:14 y que concluye con la batalla de Har-magedón, peleada por el Hijo de Dios y sus “llamados, escogidos y fieles” y que da paso inmediatamente al reino de Dios. Y es que si ello fuera como usted nos lo propone, que el regreso de Jesucristo se produjera después de ocurrida la “gran tribulación” al término de la cual, Satanás es abismado al abismo por mil años (Rev. 20:1-3)…… ¿nos podría explicar usted, en qué momento se produce la llamada “primera” resurrección? O dicho de otra manera ¿para cuándo fija usted lo relatado en Rev. 11:7-12? Porque recordemos que acaba de publicar un video (18/10/15) titulado “En la parusía la iglesia recibirá y dará la bienvenida a Jesús y no al revés” y para lo que se apoya en 1 Tes. 4:15-17, en dónde se lee como sigue:

Porque esto les decimos por palabra de Jehová: que nosotros los vivientes que sobrevivamos hasta la presencia del Señor (los personajes de los que se nos habla en Rev. 11:3) no precederemos de ninguna manera a los que se han dormido en la muerte; 16 porque el Señor mismo descenderá del cielo con una llamada imperativa, con voz de arcángel y con trompeta de Dios y los que están muertos en unión con Cristo se levantarán primero. 17 Después nosotros los vivientes que sobrevivamos seremos arrebatados, juntamente con ellos, en nubes al encuentro del Señor en el aire; y así siempre estaremos con el Señor.” (Acotación mía).

Luego está claro que estamos ante una resurrección conjunta de esos “ungidos” que están presentes en el tiempo del regreso de Cristo a la tierra, con la de los Pablo, Juan, Pedro y compañía…… entonces ¿nos podría usted situar ese acontecimiento en la corriente del tiempo? No se olvide que las Escrituras si lo hacen y algo que un servidor ha explicado en un montón de ocasiones…… pero es más ¿en dónde coloca usted la gran predicación de los poderosísimos “dos testigos” de Rev. 11:3 y por un espacio de tan solo 1.260 días abarcará el mundo entero, anunciada por Jesús en Mat. 24:14? ¿O pretenderá usted hacernos creer que la mamarrachada de “obra” de predicación del “prístino” evangelio del reino de Dios, emprendida por usted en Agosto de 2.007 (al menos hasta donde yo conozco), tiene algo que ver con la predicación mencionada? No olvide, por si acaso tiene la tentación de decir que si (de usted se puede esperar cualquier cosa), que la tal está liderada por un resto de poderosísimos Hijos de Dios, capaces de hacer lo siguiente:

Y si alguien quiere hacerles daño, de la boca de ellos sale fuego y devora a sus enemigos (ver 2 Rey. 1:10-14); y si alguien quisiera hacerles daño, tiene que ser muerto de esta manera (en todo caso estaríamos hablando de una brutal capacidad de autodefensa). 6 Estos tienen la autoridad para cerrar el cielo de modo que no caiga lluvia durante los días de su profetizar y tienen autoridad sobre las aguas para tornarlas en sangre y para herir la tierra con toda clase de plaga cuantas veces deseen.” (Rev. 11:5-6). (Acotaciones nuestras).

Y puesto que dichos personajes no tenemos noticia de que hayan aparecido, no puedo menos que pensar que usted, lejos de ser uno de esos Hijos de Dios comisionado por el Altísimo y como constantemente afirma ser, no es más que un paniaguado desnortado que se da ínfulas de ostentar dicha condición, cuando no es más que un pobre “iluminado” que en el colmo del disparate, el 13/02/09 y bajo el título “¿Quiénes son los ungidos de Dios?”, se nos descolgaba afirmando lo siguiente:

Yo soy un UNGIDO del Señor, y nadie debe o puede tocarme a mí, o a usted, si en verdad es un cristiano, sin tener luego que pagar un precio muy caro. Yo me considero un UNGIDO del Señor, y si usted no se considera así, entonces usted no ha entendido lo que significa ser un cristiano o un ungido.” (Negritas mías).

Mamarrachada comparable a esta otra, publicada en esta ocasión el 29 de Marzo 2008, en un artículo que llevaba el título “¡Todos los bautizados somos “Cristos”!”:

Ahora bien, “Ungidos con el Espíritu Santo” resalta otras bendiciones colaterales que Dios nos añade cuando nos entrega el Espíritu Santo, PERO LO MÁS IMPORTANTE ES QUE NOS GUÍA A LA VERDAD (Ver Juan 16:13). NADIE PUEDE SER GUIADO A LA VERDAD SIN EL ESPÍRITU OBRANDO EN ÉL.” (Negritas mías).

Observe el detalle de que, al igual que hace hoy, habla en primera persona y lo que significa que reconoce tener el espíritu santo operativo sobre usted y que como memez no está nada mal, visto lo visto; de hecho unos meses antes, eso es, el 28/08/07 y en el colmo de su “delírium tremens”, en el tema “Consejos oportunos para miles de testigos de Jehová desanimados” y hablando de la liberación que había supuesto para usted, el salirse de dicha secta, hacía la siguiente y presuntuosa afirmación:

Al contrario, soy un hombre muy feliz y dichoso, ya que por fin tengo la libertad que no gozan ellos para escribir y tener mi sitio web donde puedo exponer mis creencias personales y mis “descubrimientos” bíblicos según me lo revela el Espíritu de Dios. Sólo el Espíritu de Dios nos guía a la verdad.” (Negritas mías).

Cuando no, encabezando artículos o en su defecto firmándolos, con la disparatada acreditación de “Embajador plenipotenciario del reino de Dios” y lo que deja claro de toda claridad, que usted como payaso deja en mantillas al genial Charlie Rivel, ¡vamos, qué digo…… usted deja en mantillas al circo entero!

Sin embargo, no pasa de ser usted tan falsario como los supuestos “ungidos” de los TJ (otros que tal bailan), o los “apóstoles” de los mormones, o de los adventistas o cualquiera de esa inmensa patulea de “soplagaitas” que, como usted y arrogándose una condición que no tienen (la de “ungidos”), van intoxicando al personal con sus estrafalarias “interpretaciones” del contenido escritural. Por lo tanto y aceptando la posibilidad que apunta en el sentido de que mi cerebro está un poco “oxidado” (¡qué quiere, cosas de la edad!), me basta y sobra para darle “sopas con honda” al indigente intelectual que es usted y por muchos títulos que posea; pero no quiero terminar este escrito, sin antes comentarle algo acerca del pasaje de Mat. 25:31-34 y que con tanto énfasis me recomienda leer, con la esperanza de que su contenido “me calle la boca”…… pero se me da, Sr. Olcese, que de nuevo el “correcaminos” español se la dará “con queso” al “coyote Apologista”, porque volvamos a una porción de su correo:

De hecho, Jesús viene con sus ángeles inmediatamente DESPUES de la gran tribulación (Mateo 24:29,30) y luego mandará a sus ángeles a que hagan la separación de ovejas y cabras, y será en ese momento en que les dirá a las ovejas que están a su derecha (todos los salvos...incluidos los ungidos).” (Negritas mías).

O lo que es lo mismo y según usted, que los “ungidos” o Hijos de Dios, por tanto sus “hermanos” y como los reconoció Jesús en Juan 20:17, aparecen incluidos en el grupo de las “ovejas” colocadas en una posición de favor en cuanto al rey de la “parábola” y olvidándose, por tanto, de lo fundamental de esta, porque ¿cuál es la razón por la que ambos grupos reciben distintas retribuciones, los primeros con la vida eterna en mira (nada que ver con la inmortalidad que reciben los “ungidos”) y los segundos, con la perspectiva de destrucción eterna, según el versículo 46 y final de dicha parábola?

Tenga en cuenta, Sr. Olcese, que estamos ante una “parábola” y que no es más (por si no se lo enseñaron en sus clases de teología) que un hecho ficticio o figurado, mediante el que se pretende transmitir una enseñanza y por lo que no puede ser tomada en su literalidad, como hace usted en el colmo de su congénita ignorancia; luego lo que hay que entender de dicha “parábola” y como enseñanza fundamental, es que en un momento determinado y para alcanzar el reino de Dios, las personas tendrán que elegir entre el estar a favor de esos personajes identificados como los “hermanos más pequeños” del rey de la parábola o estar en contra de ellos. Personajes estos aún por aparecer y anunciados en Rev. 11:3 como los “dos testigos”, en todo caso un “resto” o remanente de Hijos de Dios por salir a la luz y que serán el punto de referencia para determinar el futuro de otras personas, siempre en función del apoyo que estas les den o no, en la tarea que les ha sido encomendada…… eso es, la de anunciar mediante la predicación señalada en Mat. 24:14 y por espacio, repito, de 1.260 días, el inminente establecimiento del reino de Dios en la tierra.

Por lo tanto, resulta que el ser colocado uno a la derecha de Jesucristo y por tanto apto para la vida eterna, o por el contrario, colocado a su izquierda y por ello merecedor de destrucción eterna, pasa ineludiblemente por tomar determinada posición con respecto de unos terceros y a los que el Hijo de Dios identifica como “mis hermanos más pequeños”, obviamente, porque son los últimos en aparecer en escena; luego está claro que estos no pueden formar parte del grupo de los juzgados, puesto que ellos son el referente a partir del cual se ejecuta juicio sobre dicho grupo, bien sea este positivo o negativo. Quiero incidir, Sr. Olcese, en el hecho de que los “ungidos” y por ser Hijos de Dios, son dotados con la inmortalidad (Rev. 20:49), mientras que el grupo de los colocados en la favorable posición a la derecha del rey de la “parábola” y según el versículo 46 de la misma, parten “hacia la vida eterna” y que es algo totalmente diferente a tener la inmortalidad, que es otra cosa…… una razón más, por la que en dicho grupo no puede haber “ungidos” incluidos.

Concluyendo, Sr. “teólogo” vs. “ingeniero”, que no es usted más tonto porque no entrena, pues se ha contado una “película” y encima se la ha creído, como es la de tenerse por un Hijo de Dios, que el espíritu santo le susurra cosas al oído, que va a reinar con Cristo en el milenio, que va a tener poder sobre tantas o cuantas ciudades y otras estupideces por el estilo. Por otra parte y permítame la observación, resulta y por mucho que se esfuerce, que un “cerebro oxidado” como el de un servidor no alcanza a entender como un tan alto personaje como usted afirma ser (¡nada menos que un Hijo de Dios!) y en los tiempos cruciales que estamos viviendo, limite su aportación a esa mamarrachada (no me puedo imaginar a los Pedro, Pablo, Juan, etc. en esta tesitura) que es su página de videos en YouTube y en la que, aparte de mostrarnos que su cabeza solo sirve para llevar sombreros y que tiene corbatas y trajes, solo publica videos de algo más de un minuto, cuando no de unos pocos segundos y repetidos en siete u ocho idiomas todos ellos, para al final “de curso” poder sacar pecho y decirnos que ha publicado tantos o cuantos miles de videos.

Sencillamente no lo entiendo, Sr. Olcese…… ¡pero igual es por eso que usted dice: porque tengo el “cerebro oxidado”!

Armando López Golart


domingo, 18 de octubre de 2015

Pero…… ¿a quién sirven realmente, los miembros activos de los Testigos de Jehová?


Si usted es militante activo de dicha organización religiosa y que en principio es una opción tan respetable como cualquier otra, probablemente nunca se ha planteado hacerse dicha pregunta…… sin embargo, esta resulta de suma importancia en su sincero deseo de servir a su Sumo Hacedor, Jehová Dios; ello viene a cuento del comentario acerca del texto diario que dicha organización publicaba el viernes 16 del mes Octubre del corriente año de 2.015 y sustentado por el pasaje de Ecle. 12:1, en donde se lee como sigue:

Acuérdate de tu Magnífico Creador antes que procedan a venir los días calamitosos.”

Y este es el argumento que sigue a continuación del mismo, tomado de su publicación de cabecera La Atalaya:

Empleando lenguaje poético, Salomón describió los días calamitosos de la vejez (Ecl. 12:2-5). Nadie debería esperar a llegar a esa etapa de la vida para empezar a servir a Jehová. Aun si llevamos sirviéndole muchos años, de vez en cuando nos conviene pararnos a pensar en lo magnífico que es nuestro Creador. ¿No nos causan asombro los seres vivos? La complejidad de su diseño está más allá de nuestra comprensión. Jehová nos da tantas cosas y tan variadas que tenemos muchas oportunidades para disfrutar de la vida. Cuando contemplamos su creación, se renueva el aprecio que sentimos por su amor, sabiduría y poder (Sal. 143:5). Pero recordar a nuestro Magnífico Creador también implica reflexionar en lo que él espera de nosotros. Esa reflexión sin duda nos motiva a expresarle nuestra gratitud sirviéndole con toda el alma el resto de nuestros días (Ecl. 12:13). w14 15/1 4:1-3.” (Negritas nuestras).

Por nuestra pasada militancia en dicha organización, sabemos de sobra que con esas palabras se hace hincapié, fundamentalmente, en lo que ellos denominan “servicio del campo” y que no es otra cosa que el dedicar a la obra de predicación cuantas horas mejor, colocar el mayor número de publicaciones posibles y ello, con el loable objetivo de conseguir nuevos adeptos a la causa…… y aquí es donde empieza el problema, porque veamos: toda organización religiosa y por definición, no es más que una estructura piramidal, eso es, que cuanto más amplia sea la base (entiéndase sus fieles militantes), mayor es la sostenibilidad de su cúpula dirigente y que sencillamente vive de ello. Porque hay una ecuación que no falla: a más militantes, más literatura colocada y más contribuciones “voluntarias” recibidas en las distintas congregaciones y con ello, mayores ingresos económicos para sus líderes y que viven como reyes, a costa del esfuerzo sincero de sus fieles seguidores…… y ello, en todas las organizaciones religiosas que ustedes quieran investigar (por pequeñas que estas sean), siendo por lo tanto la de los Testigos de Jehová, una más entre tantas.

Dicho lo cual y si usted que nos lee es miembro de esta organización, permítanos una pequeña puntualización: desde este blog, jamás hemos atacado a la base militante de dicha estructura religiosa porque nos consta la honradez y buena fe de esas personas que la componen; es cierto que en su mayoría son personas de no muchas luces (pues a los más “espabilaos” pronto los promocionan a una posición superior para comprar su voluntad con un “galoncito”, entiéndase el cargo de siervo ministerial o anciano y algo de lo que hablábamos extensamente en nuestro escrito del 16/03/14), pero con una calidad humana extraordinaria y que se esfuerzan, no solo por aplicar en su vida las normas morales contenidas en las Escrituras, sino el intentar ayudar a los demás en dicho empeño y aportando para ello de su tiempo, esfuerzo y recursos económicos, lo que las convierte en personas totalmente fiables y dignas del mayor de los respetos. De hecho, no son pocos los militantes de esa organización que nos honran con sus visitas a nuestro blog; y lo sabemos porque uno de nuestros artículos más leídos y con gran diferencia, es el que publicamos en fecha 08/06/13 bajo el título “Los Testigos de Jehová...... y las relaciones sexuales dentro del matrimonio” y ¿a quién puede interesar dicho tema, por lógica, como no sea a los miembros de dicha organización y que, nos consta, que se han beneficiado mucho de su contenido?

Pero volviendo a lo que íbamos y referente al “servicio de toda alma” que debemos a nuestro Creador y que en dicha organización se sustancia mediante la predicación de puerta en puerta y como razón fundamental sobre la que gira la existencia de la misma, la cuestión que todo miembro de esta se tendría que plantear en primer lugar, es si está participando en una obra de predicación que tenga el “respaldo” de Jehová Dios...... o no: dicho de otra manera, si la predicación en la que está uno participando y como afirman los dirigentes de dicha sociedad religiosa, se corresponde a la que anunció Jesús en Mat. 24:14:

Y estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces (eso es, terminada dicha predicación) vendrá el fin.” (Acotación nuestra).

Cuestión esta que a su vez plantea una subordinada, como puede ser la siguiente interrogante: si esta predicación que llevan a cabo los TJ, se corresponde efectivamente con la anunciada por Jesús ¿por qué, entonces, en las Escrituras se nos habla de otra predicación aún futura llevada a cabo por un “resto” de poderosísimos Hijos de Dios y por espacio de tan solo 1.260 días? Veámoslo:

Y haré que mis dos testigos profeticen mil doscientos sesenta días vestidos de saco”. 4 Estos son simbolizados por los dos olivos y los dos candelabros y están de pie delante del Señor de la tierra (evidentemente estamos ante un resto “ungido”).

5 Y si alguien quiere hacerles daño, de la boca de ellos sale fuego y devora a sus enemigos; y si alguien quisiera hacerles daño, tiene que ser muerto de esta manera. 6 Estos tienen la autoridad para cerrar el cielo de modo que no caiga lluvia durante los días de su profetizar y tienen autoridad sobre las aguas para tornarlas en sangre y para herir la tierra con toda clase de plaga cuantas veces deseen.” (Rev. 11:3-6). (Acotación nuestra).

Pasaje que a su vez nos abre un amplio abanico de cuestiones contradictorias y que podríamos iniciar con la siguiente reflexión: si ya tenemos una predicación en marcha y según se nos dice, apoyada de forma directa por el propio Jesucristo ¿por qué en las Escrituras se nos anuncia otra? Y que no podemos estar hablando de la misma predicación, queda claro por el hecho que los Testigos de Jehová llevan más de 100 años predicando, mientras que en el pasaje señalado se nos habla de una obra de predicación de tan solo tres años y medio (1.260 días); por otra parte, se nos dice que la tal predicación será liderada por poderosísimos Hijos de Dios, mientras que hasta donde nosotros sabemos, los supuestos “ungidos” de dicha organización no son más que hombres corrientes sin poder alguno…… es más, es el propio Cuerpo Gobernante de los Testigos de Jehová el que despeja cualquier duda al respecto, con la siguiente afirmación que se encuentra en La Atalaya del 15/07/1.981 (pág. 29), en donde bajo el subtema “¿Por qué ajustes en el entendimiento?”, se puede leer como sigue:

Puede ser que alguien pregunte: ‘Si los testigos de Jehová están recibiendo “alimento al debido tiempo,” ¿a qué se debe que de vez en cuando han cambiado de entendimiento en cuanto a ciertas enseñanzas?’ La Biblia contesta: “Pero la senda de los justos es como la luz brillante que va haciéndose más y más clara hasta que el día queda firmemente establecido.” (Pro. 4:18) Igualmente, tal como la congregación del primer siglo tenía solamente conocimiento parcial, así también sucede con “el esclavo fiel y discreto” de hoy día. El conocimiento cabal de muchos asuntos espirituales se alcanza únicamente a medida que los propósitos de Dios llegan a la plenitud de su realización. (1 Cor. 13:9-12) El “esclavo” no está bajo inspiración divina; más bien, continúa escudriñando las Escrituras y examinando detenidamente los acontecimientos mundiales, así como la situación en que se encuentra el pueblo de Dios, a fin de entender el cumplimiento progresivo de las profecías bíblicas. Debido a limitaciones humanas, a veces puede haber un entendimiento incompleto o incorrecto de algún asunto que quizás requiera corrección más tarde.” (Negritas nuestras).

Luego estamos ante un implícito reconocimiento de que dichas personas no son “ungidas” o Hijos de Dios y lo que significa que, no solo no tienen los poderes sobrenaturales inherentes a dicha condición, sino que tampoco están guiadas por el espíritu santo del Altísimo o, como ellas dicen, “no están bajo inspiración divina”…… y lo que abre la puerta a nuevas dudas, a tenor de lo que Pablo dijo en Rom. 8:14:

Porque todos los que son conducidos (o guiados, según versiones) por el espíritu de Dios, estos son los hijos de Dios.” (Acotación nuestra).

Por lo que si dichas personas no están “bajo inspiración divina”, eso es, que no son “conducidas” por el espíritu de Dios (luego mucho menos entonces, por el propio Jesucristo y como siempre han afirmado desde su Cuerpo Gobernante), resulta y según Pablo que tampoco son Hijos de Dios como siempre han afirmado, por lo que al morir no van al cielo para reunirse con los Pedro, Pablo, Juan y compañía para reinar al lado de Jesucristo en el milenio…… y si resulta que no son todo eso y lo que pasa es que nos han mentido en todos esos puntos (algo obvio, a tenor de estas pruebas aportadas), no solo su predicación no puede estar avalada por Jehová Dios y lo que coloca a los miembros de dicho Cuerpo Gobernante, en el plano de simples fraudulentos embaucadores, sino que además les aplican las siguientes graves palabras:

Sin embargo, el profeta que tenga la presunción de hablar en mi nombre una palabra que yo no le haya mandado hablar (en este caso, la responsabilidad de llevar adelante la predicación de Mat. 24:14), o que hable en el nombre de otros dioses, ese profeta tiene que morir (en todo caso, sufrir un severo castigo divino). 21 Y en caso de que digas en tu corazón: “¿Cómo conoceremos la palabra que Jehová no ha hablado?”, 22 cuando hable el profeta en nombre de Jehová y la palabra no suceda ni se realice, esa es la palabra que Jehová no ha hablado. Con presunción la habló el profeta. No debes atemorizarte de él.” (Deut. 18:20-22). (Acotaciones nuestras).

Queda claro entonces y a tenor de dichas palabras, que la organización de los Testigos de Jehová no habla “en nombre” de Dios y por lo que no puede ser la representante legal de Este en la tierra, como de forma altanera afirman ser; y es que todos estamos al tanto de los errores garrafales que ha cometido dicha organización en cuanto a determinadas enseñanzas, así como de supuestas fechas para “el fin del mundo” y todas ellas fallidas…… luego dado que su palabra “ni sucede ni se realiza” y, repetimos, siempre según el pasaje leído, es obvio que estamos en dichas “enseñanzas” ante una palabra “que Jehová no ha hablado” y lo que nos permite identificar a dicha organización como un falso profeta, por lo que tiene el total repudio del Altísimo y según se desprende del versículo 20 con el que inicia dicho pasaje.

Permítannos señalar, que los autores de este blog ya éramos militantes de dicha secta en el año 1.975 y todavía recordamos la expectación despertada y en la que vivíamos todos, dado que en distintas publicaciones, así como en discursos de asamblea y en los discursos de congregación, se nos había estado señalando que este era el año clave, pues con el se cumplían los 6.000 años de la creación de Adán y por lo que el fin del mundo estaba al caer y el reino de mil años de Dios a punto de ser establecido en la tierra; de hecho, todavía quedan “restos” de otra anterior célebre “metida de pata” , como son ejemplares del libro “Millones que hoy viven, no morirán jamás” y en el que se anunciaba dicho “fin del mundo” para el año 1.925…… es más: es la propia organización la que reconoce que eso fue así, pues en La Atalaya del 15/08/09, en su pág. 16 y párr. 17, se encuentra el siguiente explícito comentario:

De 1918 a 1925, los siervos de Jehová de todo el mundo presentaron en más de treinta idiomas el discurso “Millones que ahora viven no morirán jamás”, el cual explicaba en qué consiste la esperanza de la vida eterna en la Tierra.” (Negritas nuestras).

Podríamos señalar y por aquello de añadirle “picante” al asunto, que tan solo medio año después y en La Atalaya 15/02/10, en su pág. 15-16, párr. 8, hacían un pequeño “arreglillo” en un intento de enmascarar tan sonado fracaso, diciendo lo siguiente:

Los cristianos ungidos (noten como continúan identificándose como personas “ungidas” eso es, que se declaran ser Hijos de Dios, cuando hemos visto que en 1.981 había afirmado todo lo contrario) están transmitiendo esta invitación desde 1918. Aquel año presentaron el discurso “Millones que ahora viven quizás nunca mueran”, el cual indicó que muchas personas vivirán en una Tierra paradisíaca después del Armagedón.” (Acotación y negritas nuestras).

Es obvio que detrás de esa “corrección” hay una evidente y perversa intención de engañar a los miembros de su feligresía (en otra mentira más), pues el título original de dicho discurso, así como el del libro publicado en su momento era un contundente “Millions now living will never die!” en su versión original en inglés publicada en 1.920 y que, como hemos señalado, se publicó en español bajo el título “Millones que ahora viven, no morirán jamás”; con lo que se complica aún más el asunto de la credibilidad en las “enseñanzas” de esa organización con la que usted quizás se asocia, si tenemos en cuenta las palabras del bueno de Santiago y que haría muy bien en tenerlas en cuenta:

La fuente no hace que lo dulce y lo amargo salgan burbujeando por la misma abertura, ¿verdad? 12 Hermanos míos, la higuera no puede producir aceitunas, ni la vid higos, ¿verdad? Tampoco puede el agua salada producir agua dulce.” (Sant. 3:11-12).

Lo que debidamente traducido significa que de una misma “fuente” (la “organización” o Sociedad Watchtower en este caso), no puede salir la mentira y la verdad al mismo tiempo y lo que nos retorna a la cuestión planteada en el titular de este escrito: usted como testigo de Jehová ¿a quién sirve realmente…… a Jehová, o a la “Organización” y que es algo tan distinto que le pondría en una delicada situación ante Jehová Dios y al que usted cree servir? A nuestro entender, a quien está sirviendo todo militante de dicha secta, no es más que a unos desaprensivos que amparados en la capa “de las buenas nuevas del reino de Dios”, lo que hacen es aprovecharse mediante el engaño (lo que ya nos habla de su “procedencia” según Juan 8:44) y sobre todo, de la coacción (el miedo a ser uno expulsado y con lo que ello conlleva de sufrimiento personal, por la destrucción de amistades de años e incluso de familias enteras), del esfuerzo de personas honestas y honradas engañadas en su buena fe…… pero circunstancia esta, no obviemos este detalle, que no exime a dichas personas de tener su propia responsabilidad ante Jehová Dios, pues esto es lo que leemos en 2 Tim. 2:3-4:

Esto es excelente y acepto a vista de nuestro Salvador, Dios, 4 cuya voluntad (expresión esta que viniendo de Quien viene, adquiere rango de mandato) es que hombres de toda clase se salven y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad.”

Y resulta que la primer “verdad” que uno debe de conocer, en su deseo de ajustarse a la “voluntad” de su Creador, es la de averiguar en dónde se mete para adorarlo correctamente…… eso es, averiguar la procedencia, historia y hechos de la organización religiosa con la que se asocia y que se le presenta como instrumento de Dios para esparcir “la verdad” y por tanto únicos “poseedores” de esta, al contrario que el resto de organizaciones que no son y desde su particular e interesado punto de vista, más que meros instrumentos de Satanás para extraviar al “personal”; porque de esa honesta investigación (los autores de este blog la hicimos en su momento), puede depender la vida de uno, si nos atenemos a lo que se lee en Rev. 18:4:

Y oí otra voz procedente del cielo decir: “Sálganse de ella (de cualquier forma de adoración que no cuente con la aprobación divina), pueblo mío, si no quieren participar con ella en sus pecados y si no quieren recibir parte de sus plagas”.” (Acotación nuestra).

Palabras estas, que obligan a cualquier militante de dicha organización a tomarse muy en serio dicha advertencia, porque la cosa no va de broma; por lo que prescindiendo de que la información que tiene en este momento en sus manos, se la hayan proporcionado unos supuestos “apóstatas” (así nos califican a aquellos que decidimos en su momento servir, no a ellos, sino al Altísimo y por ello, mandarles a hacer puñetas) su obligación es contrastarla, pues ya conocen aquella máxima de que “La verdad, es la verdad, la diga Agamenón o su porquero” y, si mucho nos apuran, hasta si el que la dice es el propio puerco. Por lo que la información que ha leído y prescindiendo de quién la haya publicado y además, expuesta con todo lujo de detalles, ahí está y lo que obliga a cualquier militante de dicha secta a comprobar si dicha información se ajusta a la realidad o no; no sea el caso y es solo “un suponer”, que Jehová Dios, usando a unos “taimados apóstatas” (en su momento usó hasta a una burra para corregir a un profeta, según Núm. 22:22:31), le esté dando a usted un “toquecito” de atención para que reaccione y se posicione correctamente ante Él…… luego, querido ex-correligionario, a usted le toca decidir qué hace con lo que acaba de leer.

Pero séale sabido, querido ex-compañero de creencia, que si cuando nuestro Creador traiga todas las cosas a juicio, está usted asociado con una religión falsa como es la de los Testigos de Jehová, será plagado junto a ella…… a menos, eso sí, que uno suponga que Rev. 18:4 no dice lo que todos entendemos que dice y lo que ya sería mucho suponer.

Y si usted, querido amigo que nos lee, resulta por el contrario que no está relacionado con esa organización (¡bien por usted!), quizás concordará con nosotros en que sería una buenísima obra imprimir este escrito y cuando lo visiten esas personas (repetimos, honestas y bien intencionadas en su inmensa mayoría las que llaman a su puerta, aunque engañadas, eso sí), ofrecérselo como intercambio a sus revistas…… quizás algunas de ellas y en un futuro, se lo agradecerán. Y si no es este el caso, pues ya conoce aquella máxima de Mark Twain en el sentido de que “es más fácil engañar a una persona, que convencerla de que ha sido engañada”, lo que si tiene usted seguro es una cosa: ante esa maniobra “defensiva” por su parte y como no podrán desbaratarla, dejarán de visitarle…… ¡créannos, lo sabemos por experiencia!

MABEL


jueves, 15 de octubre de 2015

¿“Ángeles”…… o “mensajeros”?


Antes de empezar con nuestro comentario, permítannos una pequeña observación: cuando nosotros publicamos algo rebatiendo determinadas propuestas del “celebérrimo” personaje de Apologista Mario Olcese, no es que tengamos fijación con éste, sino que con ello estamos rebatiendo también a todos aquellos que piensan como él y que son muchísimos más de los que se imaginan, prescindiendo de la “ganadería” religiosa a la que pertenezcan; por ello, nuestros artículos, lejos de ir “en contra de…”, van “a favor de…”, en este caso en favor de ustedes que nos leen. Porque realmente lo que pretendemos, es poner a nuestros lectores en guardia ante la avalancha de los “falsos maestros” (2 Ped. 2:1) que según el apóstol Pedro aparecerían en los últimos días…… el Sr. Olcese no es más que la excusa, que nos permite el poder compartir con ustedes lo que realmente dicen las Escrituras. Así como la forma correcta de averiguarlo, pues en nuestros escritos les mostramos los pasos a seguir para encontrar el verdadero entendimiento de estas y que es lo que a la postre le permitirá a uno alcanzar el tan esperado reino de Dios y que lo tenemos a la vuelta de la esquina. No olvidemos que la Biblia no es más que el libro de instrucciones que Jehová Dios puso a nuestra disposición, para ponernos al corriente de los pasos que debemos de seguir para beneficiarnos de sus promesas…… el primero de ellos, este:

Esto es excelente y acepto a vista de nuestro Salvador, Dios, 4 cuya voluntad (luego un mandato en toda línea) es que hombres de toda clase se salven y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad.” (1 Tim. 2:3-4). (Acotación nuestra).

Luego pensando que nuestro pequeño esfuerzo puede contribuir a que alcancen tal logro, pasemos al tema de hoy y que tiene que ver, no tanto con el artículo que publicamos el pasado día 21/09/15 y en el que tratábamos de desmontar un planteamiento del personaje aludido (compartido por no pocos “entendidos” en la materia y cómo les hemos señalado), sino por la respuesta que a este le dio. Porque apoyándose en el pasaje de Mat. 25:31, ese “caballero” afirmaba que cuando Jesucristo regrese a la tierra lo hará acompañado por “ángeles” y no por la “Iglesia” o conjunto de sus seguidores fieles; por ello señalábamos en nuestro escrito, la necesidad de que cuando uno lee las Escrituras no tiene que hacerlo condicionado por lo que otros le han dicho que estas dicen (en este caso, los primeros traductores de estas y algo que razonábamos en el artículo mencionado), sino lo que este uno interpreta de ellas y así no caer en “vicios” inducidos.

Por ejemplo, cuando en la Biblia leemos el término “ángel”, no tenemos que presuponer de entrada que estamos hablando de un ser celestial, sino lo que el contexto nos indique en ese momento…… recordemos, que dicha expresión procede del griego ág·gue·los y este a su vez, del hebreo mal·ʼákj y expresiones ambas que literalmente significan “mensajero”. Entonces y según sea el contexto en el que nos encontremos, tenemos que decidir qué término usar: si estamos hablando del personaje que le dio la revelación al apóstol Juan, estaríamos hablando de un mensajero de origen celestial y por lo que el vocablo “ángel” sería el procedente…… sin embargo, a Jesús y a los que este envió, aunque “enviados” de Dios en definitiva, no se les puede aplicar el término “ángel” porque estamos hablando de seres humanos, por lo que les llamaríamos “mensajeros” de Dios ¿entienden por dónde va más o menos la cosa? Luego tiene que quedar claro que no hay que aplicar estrictamente la literalidad de las expresiones mal·ʼákj o ág·gue·los y que desde tiempos inmemoriales en las diferentes traducciones de las Escrituras nos han vertido por “ángel”, sino el término que en cada momento identifique correctamente en el idioma de uno, al personaje del que estamos hablando y que en español sería “ángel” si estamos hablando de un ser celestial, o “mensajero” si estamos hablando de un ser humano…… sin ir más lejos y por aquello de enfatizar la cosa, tenemos que los “dos testigos” de Rev. 11:3 no serían más que unos “mensajeros” enviados por Dios, mientras que al “mensajero” enviado a transmitir información a Daniel acerca de la profecía de las “70 semanas”, se le tiene que aplicar el término “ángel”.

Dicho lo cual y pensando que la idea ha quedado correctamente establecida, pasemos ahora a la respuesta que Apologista Mario Olcese dio a nuestro planteamiento en el video publicado el 25/09/15 y bajo el ya sugerente titular “Repito: son los ángeles santos los que acompañan al Hijo de Dios durante su parusía” (en ese entretanto, nos ha mandado dos videos más, uno hablando de los “100 porqués razonables para salirse de la Watchtower” y otro tratando el tema de “Recomendaciones técnicas para la crianza de pollos”…… ¡justito de lo que le estamos hablando nosotros, oigan!) y en el que se reafirmaba en sus tesis, aunque para ello se limitaba sencillamente a enumerar una serie de textos en los que se señala que Jesús regresa acompañado de sus “santos ángeles” (Mat. 25:31, Mar. 8:38, Luc. 9:26), pero sin entrar a rebatir en ningún momento los argumentos que nosotros dábamos en nuestro escrito para sostener nuestra propuesta y como es costumbre en ese personaje: se reafirma en la tropelía publicada a modo de “enseñanza”, pasando por alto los argumentos que en contra de su exposición, se le hayan formulado.

Continúa en su video, sorprendentemente y para validar su posición, citando otros pasajes que usan también el término “ángeles”, pero relacionados los tales con el momento que en la tierra se lleva a cabo la predicación de Mat. 24:14 anunciada por Jesús en su momento (Mat. 24:31, Mar.13:27, Mat. 13:41, Mat. 16:27) y que hasta donde nosotros entendemos de las Escrituras, esta no la llevan a cabo ángeles, sino los “dos testigos” (Rev. 11:3) o resto “ungido” por aparecer y a la manera de los Pedro, Juan, Pablo y muchísimos otros del primer siglo (hombres en todo caso), que recibirán la colaboración de otras personas para llevar adelante su tarea o comisión, siempre según el contenido de la “parábola de las oveja y las cabras” y que pueden ustedes leer en Mat. 25:31-46…… por lo que en este caso, tendríamos que estar hablando de “mensajeros” y no de “ángeles”, como de forma machacona nos traducen las versiones bíblicas actuales.

Permítannos sin embargo y antes de continuar con nuestra exposición, hacer una pequeña matización y por aquello de entender de qué estamos hablando nosotros: porque en todo momento los autores de este blog y en lo relativo al regreso de Cristo a la tierra, hemos centrado nuestra atención al momento concreto en que éste regresa en persona (eso es, de forma visible) para destruir a las naciones con sus líderes al frente y evento que en las Escrituras recibe el nombre de “la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso”, en la que se reúne a “los reyes de toda la tierra habitada” en oposición a Jehová y batalla ésta dirigida por Jesucristo (Rev. 16:14; 16) y que coloquialmente nos referimos a ella como la “batalla de Har-magedón” y que no la pelean los ángeles. Y decimos esto, porque si bien es cierto que los autores de este blog hemos dejado probado sin lugar a duda alguna que la “primera” resurrección es consecuencia directa e inmediata del regreso de Jesucristo a la tierra (1 Tes. 4:15-17), no es menos cierto que ello puede llevar a engaño a aquellos que no estén muy puestos en la cosa, eso es, que no estén al tanto de lo que realmente sucede, porque lean con atención lo que se nos dice que ocurre en ese preciso momento:

Y después de los tres días y medio, espíritu de vida procedente de Dios entró en ellos y se pusieron de pie y gran temor cayó sobre los que los contemplaban. 12 Y oyeron una voz fuerte procedente del cielo decirles: “¡Suban acá!”. Y subieron al cielo en la nube y sus enemigos los contemplaron.” (Rev. 11:11-12).

Recordemos y por aquello de centrarnos, que estamos en ese dramático momento vencida ya la primera mitad de la “semana 70” en tres días y medio, cuando se produce el regreso del Hijo de Dios a la tierra y que hemos dicho, conlleva asociada la inmediata “primera” resurrección; pero si analizamos este pasaje con cuidado, nos encontramos con la siguiente paradójica situación: nos enteramos del regreso de Cristo a la tierra, no por una presencia física y directa de éste regresando apoteósicamente acompañado por una ingente cantidad de ángeles, sino solo por el “efecto reflejo” que dicho regreso tiene con relación a la resurrección de los “dos testigos”…… y como sea que Pablo nos dijo que la resurrección de estos, “no precedería” (1 Tes. 4:15), eso es, no se podía producir antes que la de los restantes seguidores de Cristo del primer siglo, es por lo que podemos concluir que estamos ante la llamada “primera” resurrección y prueba evidente, de que el Hijo de Dios ya está de retorno en la tierra. Pero a todo esto, resulta que a Jesucristo en ese momento aún no lo ha visto nadie, sino que lo que se les da a los resucitados “dos testigos” es un autoritativo mandato de “¡Suban acá!” y siendo que lo que ve a continuación el espectador de ese lance, es lo siguiente:

Y subieron al cielo en la nube y sus enemigos los contemplaron.” (v. 12 b).

O sea, que lo que realmente se ve de tan magno evento, es el ascenso al cielo de los resucitados “dos testigos”…… y nada más. Dicho de otra manera, que si bien se percibe y para entendernos, la influencia de la presencia activa de Cristo en la tierra, por medio de la resurrección de los “dos testigos”, ni se ve físicamente a Jesucristo, ni se ve la resurrección de los Juan, Pablo, Pedro y compañía, sino solo a los “dos testigos” ya resucitados partiendo hacia el cielo y como se les había ordenado…… sin embargo, recordemos de nuevo, que es el regreso de Cristo a la tierra lo que provoca la “primera” resurrección, luego resulta que de alguna manera éste ya ha descendido del cielo.

Por lo que estaríamos ante lo que los TJ entienden y entienden correctamente (otra cosa es que apliquen dicho entendimiento de forma disparatada)para disgusto del Sr. Olcese , en el sentido de que el regreso de Jesucristo se produce en dos fases: una primera en la que solo se percibe la influencia de su “presencia” y constatada por la “primera” resurrección y una segunda, ya visible y definitiva, en la que se presenta al frente de sus “ejércitos”, eso es, de sus 144.000 fieles seguidores (Rev. 14:4) para derrotar a las naciones rebeldes (Salmo 2) y establecer el reino de Dios en la tierra. Observen que en las Escrituras se nos insinúa un cierto “impase” en el tiempo, desde el momento en que se produce la “primera” resurrección y denunciada por ese inapeable “¡Suban acá!”, hasta el regreso visible de Jesucristo y que podría estar justificado dicho “impase” por un evento que se produce en el cielo y que se conoce como “las bodas del cordero” (Rev. 19:7) , que no es otra cosa que el encuentro de Jesucristo con su congregación al completo…… eso es, que juntos por fin ya todos los fieles seguidores de Cristo en el cielo con éste, es cuando se puede celebrar dicha simbólica boda.

Ello explicaría que entre la “primera” resurrección y la “batalla de Armagedón” existe un pequeño paréntesis aquí en la tierra, pues en la profecía de Revelación o Apocalipsis parece que antes de producirse dicha confrontación, hay una serie de desastres naturales que producen espectaculares destrozos en la tierra y causados por la ira divina (Rev. 15-18), mientras que Jesucristo no aparece visiblemente hasta Rev. 19:11 y en plan, digamos, poco “amistoso” y ya como para ultimar la cosa…… y aquí nos detenemos, para matizar lo siguiente: que en el momento de regresar Jesucristo a la tierra y antes de ese “¡Suban acá!” de los miembros participantes de la “primera” resurrección y para celebrar la simbólica boda o unión eterna entre ellos y Jesucristo, lo hubiera hecho acompañado de un gran cortejo de ángeles de Dios y como señala el Sr. Olcese, es una cuestión que no discutimos. Es más, nunca hemos entrado a debatir dicha circunstancia, porque nos parece un hecho sumamente irrelevante por la total opacidad que a dicho supuesto evento se le da; recordemos que según las Escrituras y como acabamos de explicar, nos enteramos del regreso de Cristo por la ocurrencia de la “primera” resurrección y no por una magnificente aparición del Hijo de Dios rodeado de miríadas de poderosos ángeles.

A lo que habría que añadir, el hecho poco coherente y del que algo nos tendría que decir el “teólogo” en cuestión, de como un anuncio hecho “a bombo y platillo” en las Escrituras a lo largo de siglos, acerca de un impresionante regreso de Cristo rodeado de todos sus “santos ángeles” y relatado en numerosos textos bíblicos (como nos muestra el Sr. Olcese), se produjera sin una espectacular manifestación pública de ello y tal como hemos señalado…… ¡vamos: que se podría decir que ocurre “en la más estricta intimidad”!; y con lo que, obviamente, no nos negarán que estaríamos ante un auténtico despropósito. Ya harina de otro costal y que es de lo que nosotros estamos hablando, es la del regreso físico de un Jesucristo en plan guerrero (Rev. 19:11) “para enfrentarse a los reyes de la tierra” y de aquellos que en ese momento le acompañan (evento trascendental para la humanidad) y que de ninguna manera son “ángeles”, como mostraremos a continuación y empezando por señalar a una profecía de largo recorrido, pues apunta a nuestros días y que se encuentra ya en el libro de Zacarías:

Y ustedes ciertamente huirán al valle de mis montañas; porque el valle de las montañas llegará hasta Azel misma. Y ustedes tendrán que huir, tal como huyeron debido al temblor de tierra en los días de Uzías el rey de Judá. Y Jehová mi Dios ciertamente vendrá (en la persona de Jesucristo) y con él estarán todos los santos.” (Zac. 14:5).

Noten ustedes que no se nos habla de “ángeles” en este pasaje, sino de los “santos” (o “fieles”, según versiones) y que si nos remitimos a la profecía de Daniel, estos no son otros que “el pueblo de los santos del Supremo” o “Altísimo” en algunas traducciones (Dan. 7:27)…… eso es, el conjunto de aquellos que al lado de Cristo tienen que reinar sobre el mundo y por lo que, a tenor de lo leído en Hebr. 2:5, de ninguna manera podríamos estar hablando de ángeles; pero veamos qué se nos dice al respecto en otro pasaje, en este caso en el de Rev. 17:14:

Estos (los reyes de la tierra) combatirán contra el Cordero, pero, porque es Señor de señores y Rey de reyes, el Cordero los vencerá. También, los llamados y escogidos y fieles que con él están lo harán (eso es, que participan en dicha victoria).” (Acotaciones nuestra).

Y los ángeles podrán ser todo lo “fieles” que el Sr. Olcese quiera, pero lo que no pueden ser nunca es “llamados” o “escogidos”…… luego queda claro que no son los ángeles los que acompañan a Jesucristo en su regreso a la tierra para establecer el reino de Dios; no podemos olvidar al respecto, las palabras proféticas de Pablo cuando dijo lo siguiente:

Por su parte, el Dios que da paz aplastará a Satanás bajo los pies de ustedes (no de los ángeles) en breve. Que la bondad inmerecida de nuestro Señor Jesús esté con ustedes.” (Rom. 16:20). (Acotación nuestra).

Sin embargo el personaje en cuestión, ignorante hasta las cachas, continúa en su disparatada proposición, cuando solo con usar el término “mensajero” y que es lo que significa la palabra “ángel” en los textos por él usados, bastaría para darse cuenta de lo equivocado que está al reafirmarse en esta cuestión; porque si leemos los pasajes mencionados por ese “prócer” de la teología bajo este prisma, esos es, sustituir el término “ángeles” por el de “mensajeros”, veamos en qué resulta:

Mat. 25:31: “Cuando el Hijo del hombre llegue en su gloria y todos los mensajeros con él, entonces se sentará sobre su glorioso trono (recordemos que los que comparten trono con él y según promesa reflejada en Rev. 3:21, son sus fieles seguidores y no los ángeles).” (Acotación nuestra).

Mar. 13:27: “Y entonces él enviará los mensajeros (los “dos testigos” y aquellos que con estos colaborarán) y reunirá a sus escogidos desde los cuatro vientos, desde el extremo de la tierra hasta el extremo del cielo.” (Acotación nuestra).

Mat. 16:27: “Porque el Hijo del hombre está destinado a venir en la gloria de su Padre con sus mensajeros (eso es, sus “llamados, escogidos y fieles”) y entonces recompensará a cada uno según su comportamiento.” (Acotación nuestra).

Porque la realidad y como acabamos de comprobar, es que Jesucristo regresa rodeado de aquellos que en su momento envió en calidad de “mensajeros” por todo el mundo conocido en aquél momento, a anunciar las “buenas nuevas del reino de los cielos” (Mat. 28:18-20). Sin embargo, lejos de hacer este ejercicio de lógica y con el ánimo, según dice en el video mencionado el “teólogo” Apologista Mario Olcese, de “hacer callar a sus detractores” (y que en lo que a nosotros respecta, ni él podría subir tan alto, ni aquí los “mendas” caer tan bajo) usa el pasaje de Rev. 19:11-14 como prueba definitiva e irrevocable, de lo “acertado” de su planteamiento…… por lo tanto, es con este mismo pasaje con el que desbarataremos su “castillo de naipes”, pues analicemos con detenimiento lo que se nos dice en el susodicho pasaje:

Y vi el cielo abierto y, ¡miren!, un caballo blanco. Y el que iba sentado sobre él se llama Fiel y Verdadero y juzga y se ocupa en guerrear con justicia. 12 Sus ojos son una llama de fuego y sobre su cabeza hay muchas diademas. Tiene un nombre escrito que nadie conoce sino él mismo, 13 y está vestido de una prenda de vestir exterior rociada de sangre y el nombre con que se le llama es La Palabra de Dios. 14 También, los ejércitos que estaban en el cielo le seguían en caballos blancos y estaban vestidos de lino fino, blanco y limpio.”

Y ahora entrémonos en ese último versículo 14, pues es en donde se nos dan dos claves que nos ayudarán a desmontar el disparate perpetrado por el “teólogo” Apologista Mario Olcese, porque veamos: se nos habla de unos “ejércitos” que estaban en el cielo y que seguían a Jesucristo en su regreso a la tierra, vestidos de “lino fino, blanco y limpio”…… por lo tanto, necesitamos averiguar en primer lugar qué significa ese tipo de vestimenta nada apropiada para el combate y para lo que tenemos que retroceder unos pocos versículos en ese mismo capítulo 19, concretamente a los versos 7 y 8 y en donde haciendo referencia expresa a la “Iglesia” o congregación de fieles seguidores de Jesucristo, se nos dice como sigue:

Regocijémonos y llenémonos de gran gozo y démosle la gloria, porque han llegado las bodas del Cordero y su esposa (la congregación fiel y por fin ya reunida en su totalidad) se ha preparado. 8 Sí, a ella (no a los “ángeles”) se le ha concedido estar vestida de lino fino, brillante y limpio, porque el lino fino representa los actos justos de los santos (no de los ángeles).” (Acotaciones nuestras).

Ello nos retrotrae a lo que se les ofertó a los miembros de las siete congregaciones mencionadas en los capítulos 2 y 3 de Revelación o Apocalipsis y “que vencieran”, eso es, que aguantaran hasta la misma muerte (Rev. 2:10), entre otras cosas con el ser dotados de “prendas de vestir exteriores blancas”, como premio a sus “actos justos” (Rev. 3:4-5). Luego con el pasaje que acabamos de leer en mente, volvamos de nuevo al versículo 14 de este mismo capítulo 19 del que estamos hablando y saquemos conclusiones:

También, los ejércitos que estaban en el cielo le seguían en caballos blancos y estaban vestidos de lino fino, blanco y limpio.”

Luego “blanco y en botella” y nunca mejor dicho: los que siguen a Jesucristo en su regreso definitivo a la tierra para tomar el poder sobre ella y que es de lo que se trata, no son un ejército de ángeles, sino un ejército compuesto por su “iglesia” o “congregación” de santos ya simbólicamente desposada con él y vestidos de refulgentes prendas de vestir de “lino fino, blanco y limpio”, como recompensa por su “actos justos” de extrema fidelidad…… en definitiva, sus 144.000 hermanos menores (Juan 20:17); es cierto que alguien pudiera objetar que lo que leemos en dicho pasaje es que los que le seguían era los “ejércitos de los cielos” y que ello da a entender que tendríamos que estar hablando de ángeles, pero lo que con dicha afirmación conseguiríamos y según hemos argumentado, no sería más que violentar el contexto general de las Escrituras. Recordemos que en nuestro artículo señalado al inicio de este escrito, ya mencionábamos que la Biblia que tenemos hoy a nuestro alcance, probablemente y en algunos textos nada tenga que ver con la idea original de los manuscritos más antiguos y por lo que solo el contexto general de ésta, nos puede servir de guía acerca del correcto mensaje que se nos quiere transmitir por medio de dichos textos; reiterado lo cual, veamos si tenemos una explicación lógica acerca de esos “ejércitos de los cielos” que se nos mencionan.

De entrada, hagámonos una pregunta: ¿Cómo definiría usted a unos personajes, todos ellos inmortales Hijos de Dios, por tanto seres con esencia divina, si tuviera que escribir algo sobre ellos para personas que vivirían casi 2.000 años después de usted? Porque no podría hablar de “ángeles”, porque esas personas no son ángeles…… pero es que tampoco son hombres y por lo que entendemos como “hombre” en el estricto sentido del término, pero que sin embargo y junto a Cristo, vienen procedentes del cielo; recordemos al respecto, que en uno de nuestros muchos escritos y para dar una aproximación de más o menos cercana a lo que son esos ensalzados personajes, tomamos como punto de referencia al inmenso y vasto mar: si usted se acercara a la orilla y tomara un vaso de agua de dicho mar, lo que usted tendría en el vaso no sería otra cosa que mar, aunque en una ínfima cantidad…… pero mar, al fin y al cabo. Por lo tanto y si personalizamos al mar en la figura del infinito Dios, lo que usted tendría en el vaso no sería otra cosa que una ínfima porción de Dios…… pero Dios al fin y al cabo; luego ¿cómo identificar a seres que no pueden ser llamados ángeles porque no lo son, pero que tampoco pueden ser llamados hombres, porque tampoco lo son, pero que bajan del cielo? La única pista que se nos da sobre el particular, la encontramos en 2 Cor. 5:17 y que tampoco nos aclara nada, acerca de qué nombre darles a esos excelsos personajes:

Por consiguiente, si alguien está en unión con Cristo, es una nueva creación; las cosas viejas pasaron, ¡miren!, cosas nuevas han llegado a existir.”

Probablemente lo que usted haría y como seguro hicieron los primeros traductores de los manuscritos antiguos, es tirar por la calle de en medio y hablar “de los ejércitos que estaban en el cielo” y que era los más ajustado a lo que se entendía en aquél tiempo, por todo aquello que provenía del cielo; pero note que el pasaje de Rev. 19:14 no dice “los ángeles que estaban en el cielo” y que sería lo suyo si se estuviera hablando en dicho pasaje de esos seres celestiales, sino “los ejércitos que estaban en el cielo”…… entonces dado que los miembros participantes de la llamada “primera” resurrección, son primero elevados a los cielos (Rev. 11:12), luego es de donde bajan acompañando a Jesucristo, nada nos indica que los acompañantes de Jesucristo y por bajar del cielo, tengan que ser precisamente ángeles. Y en cuanto al plural del término “ejército” empleado en esa frase, bien podríamos estar ante una especie de plural mayestático, eso es, que solo pretenda indicar el inmenso poder desplegado proveniente del cielo; recordemos y eso ya no es más que una simple conjetura personal de los autores de este blog, pero del todo verosímil en el contexto en el que nos movemos, que en su momento señalamos que cada uno de esos personajes y por ser Hijos de Dios, tiene más poder que todos los ángeles juntos…… luego es obvio que el inmenso poder acumulado por Jesucristo y sus 144.00 “hermanos” menores y desplegado en esa lucha por venir y como un todo, bien se podría reflejar de forma mayestática con el término “ejércitos”.

En todo caso, la evidencia del contexto escritural no nos permite suponer el que Cristo baje a combatir a los reyes de la tierra acompañado por los ángeles, pues a los que se les concedió la autoridad para “destrozar a las naciones como vasos de alfarero” no fue a los ángeles, sino a los fieles seguidores de Cristo:

Y al que venza y observe mis hechos hasta el fin, le daré autoridad sobre las naciones 27 y pastoreará a la gente con vara de hierro, de modo que serán hechos pedazos como vasos de barro, como lo que he recibido de mi Padre.” (Rev. 2:26-27).

Y es obvio que eso ocurre y según el Salmo 2, en el momento de producirse el conflicto de la batalla final de “Har-magedón” y con lo que termina la “gran tribulación”, en donde la naciones rebeldes con sus reyes al frente son destruidas y Satanás apresado y sacado de la “circulación” por una “temporadita” (mil años) y evento que da paso al reino de Dios…… no entiendan y como hace ese “genio” de la teología que afirma ser Apologista Mario Olcese, que dicho gobernar y hacer pedazos como con “vara de hierro” a las naciones tiene que ver con el período de tiempo del reinado de mil años de Jesucristo, porque no van por ahí “los tiros”. Por otra parte y según hemos creído demostrar, “los tiros” tampoco van por que los acompañantes del Hijo de Dios en su regreso a la tierra, sean los ángeles, sino que son sus “llamados, escogidos y fieles” (Rev. 17:14)…… todo lo demás, no son más que “historias para no dormir”, salidas de una mente con un bajísimo coeficiente intelectual.

En todo caso, dicho lo dicho y ya a modo de conclusión, solo nos queda hacerle una pregunta a ese “súmmum” de la teología y que es la siguiente: si como queda probado y lejos de duda alguna, Jesucristo viene a la tierra a pelear la batalla de Har-magedón rodeado de sus “llamados, escogidos y fieles”, en definitiva de la “Iglesia”…… ¿en qué momento, el Hijo de Dios regresa a esta acompañado de “todos sus santos ángeles”? ¿O tenemos que pensar de dicho “teólogo”, resulta que ahora comparte la enseñanza de los TJ, en el sentido de un regreso de Cristo en dos fases? Los autores de este blog ya nos hemos pronunciado al respecto y con toda suerte de argumentos probatorios, por lo que ahora resulta que “la pelota” está en el tejado del “teólogo” en cuestión…… a ver cómo, entonces, resuelve la cuestión y sin hacer el ridículo.

MABEL


sábado, 10 de octubre de 2015

¿Rapto?...... pero ¿de qué rapto nos está usted hablando, Sr. Olcese?


Como les prometíamos en nuestro anterior escrito, vamos a continuar mostrándoles diferentes “gansadas” que publica Apologista Mario Olcese y a las que presenta como genuinas verdades del contenido escritural, cuando la realidad es que no son más que disparates salidos de una mente que tal parece estar más “palla que paca”, a juzgar por las cosas que propone; y si no fuera porque la cosa es muy seria, pues estamos hablando de las cosas de Dios, la cosa podría ser hasta graciosa…… ¡pero maldita la gracia que tiene, el que se esté engañando continuamente a las ingenuas personas que se han creído que ese “ilustrado” es un teólogo! (Habíamos escrito “soplagaitas”, pero por aquello de “no hacer sangre”, lo hemos cambiado).

Porque a la barbaridad ya comentada en nuestro anterior escrito (06/10/15) y publicada por el “teólogo” en cuestión, al afirmar que la “gran tribulación” dura siete años y que Jesucristo regresa al final de la misma, se nos descolgó hace unos días hablando de la existencia de un supuesto “rapto de los inicuos” en un video publicado el 20/09/15 y de tan solo 1 minuto, 30 segundos de duración (rimbombante introducción a lo Cecil B. DeMille, incluida), en donde lo único que consigue es demostrarnos el disparate que se puede perpetrar en tan poco espacio de tiempo…… y es que solo el título, ya habla por sí solo: “El verdadero y único rapto secreto de los impíos previsto por el salmista y que nadie habla”. Porque en el mismo, ese “genio” de la teología y apoyándose para ello en el Sal. 37:10, nos asegura que existirá (¡ojo al dato!), un verdadero y único “rapto” de personas impías para sacarlas de la tierra y así limpiar esta de malas influencias…… al menos eso es lo que se concluye, tanto del titular del video señalado, como de su escueto contenido y refrendado ello por la “entradilla” de presentación del citado video:

El Salmista previó el rapto secreto post tribulacional de los impíos.”

Eso es y según dicho “teólogo”, que ya el rey David (escritor de dicho salmo) y bajo inspiración divina, previó, predijo o profetizó en su momento, que al final de la “gran tribulación” aún por acontecer en nuestros días, los inicuos serían raptados de la tierra, para que no causen más perturbación…… no nos explica dicho personaje, eso sí, es a dónde serán llevados. Pero permítannos antes de continuar, que les expliquemos qué es “el rapto” como tal y según el entendimiento bíblico que sobre dicho tema se tiene en nuestros días, pues tenemos que recordar que solo un par de siglos atrás en el tiempo, se desconocía por completo dicha enseñanza…… por lo que, ya de entrada, no podemos estar hablando de una enseñanza bíblica.

Lo que tan reciente “enseñanza” explica y apoyándose en una incorrecta interpretación de 1 Tes. 15-17 (como no podía ser de otra manera), que en un momento determinado y coincidiendo con el regreso de Cristo a la tierra, los fieles muertos de todas las épocas serán resucitados, mientras que aquellos que permanezcan vivos en ese momento serán “arrebatados” con vida al cielo conjuntamente con los resucitados, para regresar siete años después y finalizada ya la citada “gran tribulación”, para reinar al lado de Cristo por los mil años del reino de Dios…… más o menos, la cosa va por ahí. Pero el punto mollar del “rapto” en cuestión, es que este se lleva a cabo con personas que están vivas en el momento de ser arrebatadas, pues de tratarse de personas muertas estaríamos hablando de una “resurrección” y no de un arrebatamiento o “rapto”…… con lo que estamos ante una disparatada enseñanza, pues el contexto escritural desmiente radicalmente tal idea; dicho lo cual, continuemos con lo que nos quiere “vender” el Sr. Olcese, acudiendo al Sal. 37:10 por él citado y tomado de la versión bíblica que usa dicho personaje, eso es, la RV 1960:

Pues de aquí a poco no existirá el malo; observarás su lugar y no estará allí.”

Leído así “a pelo” (eso es, descontextualizado) y partiendo del peregrino supuesto de que el “rapto” como tal existiera, algo de lo que en la Biblia ni siquiera se hace una mínima mención, uno hasta podría creer que dicho salmo avala la idea que nos propone el “teólogo” en cuestión: eso es y según la esquizofrénica mente del personaje al que hacemos alusión, que uno estará mirando a un inicuo y de pronto ¡¡“zás”!!, como por arte de “birlibirloque” desaparecerá de la vista de uno, porque Jehová se lo habrá llevado por malo…… porque esto es lo que en esencia, nos está diciendo ese “súmmum” de la teología del mundo mundial. Pero claro, cuando contrastas dicho pasaje con otras traducciones bíblicas y sobre todo, lo colocas en su contexto más inmediato, la cosa cambia radicalmente; porque veamos cómo se lee dicho pasaje ya dentro de su contexto natural y en otra versión bíblica, en este caso la TLA y que es la que expresa la idea de manera más sencilla:

No des lugar al enojo, ni te dejes llevar por la ira; eso es lo peor que puedes hacer. 9 Los malvados serán destruidos (obviamente y como vimos en el artículo anterior, durante la “gran tribulación”), pero los que esperan en Dios recibirán la tierra prometida (el reino de Dios).

10 Dentro de poco (ya establecido dicho reino) no habrá malvados; podrás buscar y rebuscar, pero no encontrarás uno solo. 11 En cambio, la gente humilde recibirá la tierra prometida y disfrutará de mucha paz.” (Sal. 37:8-11). (Acotaciones nuestras).

Luego lo que se nos está diciendo, es que en el reino de Dios no se encontrará a ningún inicuo, porque estos habrán sido “destruidos” durante la “gran tribulación”…… tan simple como eso. Y ustedes pueden buscar en cualquier traducción bíblica y verán que la idea que transmiten todas ellas, es la que les hemos señalado nosotros y que tenemos muy claro cuál es el sentido correcto del mensaje bíblico, sencillamente porque antes de hacer afirmación alguna consideramos los contextos y además, contrastamos el pasaje del que se trate con otras versiones bíblicas y que es lo que se debe de hacer, si se tiene un mínimo de rigor; de hecho y leído en su contexto, la misma traducción RV 1960 usada por ese “mindungui” de la teología confirma nuestra afirmación, pues vean qué es lo que se lee en ella en dicho salmo:

Deja la ira y desecha el enojo; no te excites en manera alguna a hacer lo malo. 9 Porque los malignos serán destruidos, pero los que esperan en Jehová, ellos heredarán la tierra.

10 Pues de aquí a poco no existirá el malo; observarás su lugar y no estará allí. 11 Pero los mansos heredarán la tierra y se recrearán con abundancia de paz.”

Observarán que puesto en su contexto, en dicha versión bíblica resulta que los “malos” dejarán de existir, sencillamente porque serán “destruidos” y no porque sean objeto de un “rapto”, como incomprensiblemente nos afirma ese indocumentado de Apologista Mario Olcese y que por no saber, no sabe ni leer; si a ello le sumamos que dicho personaje destaca por su total ignorancia en cuanto al contenido escritural se refiere, así como una innata tendencia hacia la mentira (Juan 8:44) y que le lleva a ajustar las Escrituras a lo que él piensa, en lugar de ajustar lo que piensa a lo que estas dicen, ya tenemos el “follón” montado. Porque el error de base no está tanto en la mala interpretación de un pasaje bíblico, sino en la razón del porqué se produce dicha errónea interpretación y que no es otra, que una total falta de respeto a la verdad…… si a ello le sumamos un total desconocimiento del contexto escritural, como es en el caso de tan “ínclito” personaje, el disparate puede ser de proporciones siderales.

Lo sorprendente del caso y como refrendo de lo que les estamos diciendo, es que el Sr. Olcese en un video posterior al comentado y publicado el 28/09/15, eso es, tan solo ocho días después, afirmaba todo lo contrario y como queda reflejado en el mismo comentario que, a modo de entradilla, resumía el contenido de dicha grabación:

El rapto secreto de la iglesia se ha convertido en un escape oportuno de los cristianos de este mundo perverso...una suerte de sueño de opio que los mantiene ilusionados con una falsa esperanza sin sustento en las Escrituras.”

Entonces ahora tenemos y según dicho personaje, que ese “rapto secreto” (para empezar y por definición, el rapto y según se entiende actualmente no puede ser secreto) y tal como señala al final de ese comentario transcrito, es una “falsa esperanza sin sustento en las Escrituras” o, lo que es lo mismo, que estas no dan soporte a la idea de un rapto como tal, sea este de “buenos” o de “malos”. Sin embargo, tan solo ocho días antes y, suponemos, en un amplio despliegue de “conocimientos” teológicos, afirmaba sin rubor alguno que dichas Escrituras si contemplan un rapto “de los inicuos”…… y es que tal parece que el hombre está como “una chota” ¡qué quieren ustedes que les digamos!

MABEL


martes, 6 de octubre de 2015

A falta de tarea…… ¡pues ya se sabe: a peinar al gato!


Y es que dicho todo lo que había por decir acerca de las señales que nos anuncian el inminente regreso de Jesucristo a la tierra y con todo lo que ello significa, los autores de este blog nos hemos quedado sin discurso alguno (como es lógico, por otra parte, pues las señales son las que son y ya no hay más que identificar) y por lo que vamos a dedicar el tiempo en analizar algunas “genialidades” que últimamente nos ha dejado ese “crisol” de la teología que afirma ser Apologista Mario Olcese que, día sí, día también, nos prueba que lo más cercano a una Biblia que ha visto en su vida, es la hoja dominical de la iglesia de su barrio…… de lo contrario no se entiende. Porque resulta que el pasado día 19/09/15 publicó un video titulado “Y en la tierra angustia de las gentes, confundidas a causa del bramido del mar”, en el que después de una “dudosilla” interpretación de Luc.21:25-27 y en donde de nuevo nos muestra no tener ni la más remota idea del significado de lo que está leyendo, se adorna en el minuto 6 de grabación con estas dos “perlas” y como conclusión a su lectura: Jesucristo no regresa a la tierra hasta después de ocurrida la gran tribulación y que esta tiene una duración de siete años…… disparates ambos donde los haya y que solo a un ignorante integral del texto escritural se le ocurre afirmar; porque veamos, lo que al respecto se nos dice en Dan. 9:24-27:

Hay setenta semanas que han sido determinadas sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad, para poner fin a la transgresión, para acabar con el pecado, para hacer expiación por el error, para introducir la justicia para tiempos indefinidos, para imprimir un sello sobre visión y profeta y para ungir el Santo de los Santos. 25 Y debes saber y tener la perspicacia de que desde la salida de la palabra de restaurar y reedificar a Jerusalén hasta Mesías el Caudillo, habrá siete semanas, también sesenta y dos semanas. Ella volverá y será realmente reedificada, con plaza pública y foso, pero en los aprietos de los tiempos.

26 Y después de las sesenta y dos semanas Mesías será cortado, con nada para sí. Y a la ciudad y al lugar santo el pueblo de un caudillo que viene los arruinará. Y el fin del tal será por la inundación. Y hasta el fin habrá guerra; lo que está decidido es desolaciones.

27 Y él tiene que mantener el pacto en vigor para los muchos por una semana; y a la mitad de la semana hará que cesen el sacrificio y la ofrenda de dádiva. Y sobre el ala de cosas repugnantes habrá el que cause desolación; y hasta un exterminio, la misma cosa que se ha decidido irá derramándose también sobre el que yace desolado.”

Queda claro entonces, que dentro de ese espacio temporal de “70 semanas” de años (490 años) fraccionado en tres partes (7+62+1=70), se tenía que resolver la cuestión de poner fin a la transgresión, acabar con el pecado, hacer expiación por el error, introducir la justicia para tiempos indefinidos, imprimir un sello sobre visión y profeta (eso es, el cumplimiento total de todas las profecías) y ungir el Santo de los Santos (entronizar al Hijo de Dios, como rey en la tierra)…… algo que por definición solo se puede producir, cuando el reino de Dios tome posesión de su dominio sobre el mundo y evento que se sustancia al término de dicho período temporal de 490 años. Pero noten que en la información que se nos da en ese pasaje de Daniel, la “69 semana” (7+62) se cumple después de la muerte de Jesús y por lo que si todavía no se ha cumplido la exigencia del versículo 24 del pasaje leído, está claro que nos queda aún una “semana de años” por cumplir y que conocemos como la “semana 70” de Daniel. Última “semana” del ciclo que inicia con la aparición de un “caudillo” (o poderoso gobernante) que establecerá un “pacto entre los muchos”, eso es, entre Israel como sujeto de la profecía de las “70 semanas” y las naciones de tendencia islámica que la rodean, que se han caracterizado siempre por llevarse como “el perro y el gato”…… luego como queda claro que ni en esos tiempos pasados ni a lo largo de la historia posterior, ningún dirigente político o “caudillo” estableció pacto alguno entre Israel y los pueblos que la rodean (y que es de lo que trata la profecía), hemos de entender que dicha “semana 70” aún está en el futuro.

En todo caso, prescindiendo de quién sea el personaje que establezca dicho pacto “por una semana” y que no es el tema que nos ocupa, la cuestión está en que la misma comprende los últimos siete años del mundo como lo contemplamos, pues ya hemos dicho que al final de esta se establece el reino de Dios en la tierra y momento en el que se conseguirán lo logros señalados. Por lo tanto, lo que nos importa saber es qué ocurre durante dicha “semana 70”, eso es, si como dice el Sr. Olcese, son siete años de “gran tribulación” y si solo es al final de los mismos cuando regresa Jesucristo…… disparatadas afirmaciones, repetimos, donde las haya y a las que nos tiene acostumbrados dicho personaje en sus planteamientos “teológicos”, porque veamos: dicho período de siete años (“semana 70” y última del ciclo), inicia con la aparición, no solo del gobernante o “caudillo” señalado que establece el pacto mencionado, sino también de un “resto” o remanente de poderosísimos Hijos de Dios (Rev. 11:5-6), a la manera de los apóstoles y con la comisión de liderar la gran predicación anunciada por Jesús en Mat. 24:14, que se llevará a cabo en un espacio de tiempo de 1.260 días o tres años y medio (Rev. 11:3); para facilitar dicha tarea, Jehová Dios da la siguiente orden en el pasaje que vamos a leer a continuación y coincidente con el tiempo en el que dicha predicación se va a llevar a cabo:

Después de esto vi a cuatro ángeles de pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, reteniendo los cuatro vientos de la tierra (símbolos de destrucción), para que no soplara viento alguno sobre la tierra ni sobre el mar ni sobre ningún árbol. 2 Y vi a otro ángel que ascendía del nacimiento del sol, teniendo un sello del Dios vivo; y clamó con voz fuerte a los cuatro ángeles a quienes estaba concedido hacer daño a la tierra y al mar 3 y dijo: “No hagan daño a la tierra ni al mar ni a los árboles, hasta después que hayamos sellado en la frente a los esclavos de nuestro Dios”.” (Rev. 7:1-3). (Acotación nuestra).

Eso es, hasta “después” de terminada lo obra de recolección y lo que nos muestra, sin lugar a duda alguna, que la primera parte de esos siete últimos años del mundo como lo conocemos, será caracterizada por un tiempo de relativa calma y que permita la expansión a nivel mundial del mensaje a predicar…… y contrario, por lo tanto, a lo que nos dice ese “genio” de la teología llamado Apologista Mario Olcese y que cuenta por disparates sus “enseñanzas”, en este caso en el sentido de que estaríamos hablando de siete años de “gran tribulación” y que como ya hemos visto, eso es imposible, pues la primera parte de estos 7 años y según decreto divino, tienen que ver con una calma relativa a nivel mundial que permita la expansión de la predicación anunciada. Resuelta esta primera cuestión, pasemos a la segunda y que tiene que ver con la afirmación de que Jesucristo regresa a la tierra finalizados dichos siete años…… por lo tanto, vamos a averiguar cuando regresa Cristo a la tierra y con ello cuando inicia la “gran tribulación”; por lo que empezaremos por averiguar primero el “cuando” del regreso de Jesucristo a la tierra:

Porque esto les decimos por palabra de Jehová: que nosotros los vivientes que sobrevivamos hasta la presencia del Señor no precederemos de ninguna manera a los que se han dormido en la muerte; 16 porque el Señor mismo descenderá del cielo con una llamada imperativa, con voz de arcángel y con trompeta de Dios y los que están muertos en unión con Cristo, se levantarán primero.” (1 Tes. 4:15-16).

Entonces lo que aquí se nos dice, es que la llamada “primera” resurrección (Rev. 20:6) se produce como consecuencia directa e inmediata al regreso de Jesucristo a la tierra…… luego si averiguamos “cuando” se produce dicha “primera” resurrección, sabremos el momento del regreso de Cristo a este valle de lágrimas; ahora bien ¿cómo podemos averiguar el momento en que se produce dicha “primera” resurrección? Pues sencillamente, prestando atención a lo que se nos dice en el contexto bíblico, acerca de qué ocurre cuándo esos “dos testigos”, resto o remanente “ungido”, finalizan su comisión:

Y cuando hayan terminado de dar su testimonio, la bestia salvaje que asciende del abismo hará guerra contra ellos y los vencerá y los matará (……). 11 Y después de los tres días y medio, espíritu de vida procedente de Dios entró en ellos y se pusieron de pie (eso es, fueron resucitados) y gran temor cayó sobre los que los contemplaban. 12 Y oyeron una voz fuerte procedente del cielo decirles: “¡Suban acá!”. Y subieron al cielo en la nube y sus enemigos los contemplaron.” (Rev. 11:7; 11-12). (Acotación nuestra).

Es en ese preciso momento y delatado por ese “¡Suban acá!”, que se produce de manera conjunta, eso es, del “resto” aún por aparecer en nuestros días y los fieles del primer siglo (los Pedro, Pablo, Juan y compañía), lo que conocemos como la “primera” resurrección y que según Rev. 11:7, se produce exactamente a los 1.260+3 días y medio, eso es, ya vencida por tanto la primera mitad de la “semana 70…… y dado que hemos visto que dicha “primera” resurrección es consecuencia directa e inmediata (en una relación causa/efecto) del regreso de Cristo a la tierra, dicho regreso no se puede producir al final de esos siete años de los que se compone la “semana 70”, sino al inicio de la segunda parte de dicha semana y con ello el inicio de la “gran tribulación”. Porque resulta que dicha “gran tribulación” final (Rev. 7:14), es desatada sobre aquellos que han rechazado la oferta ofrecida mediante la predicación llevada a cabo por los “dos testigos” durante los primeros tres años y medio de dicha “semana 70”, al iniciar esta su segunda parte y según se deduce de 2 Tes. 1:6-9:

Esto toma en cuenta que es justo por parte de Dios pagar con tribulación a los que les causan tribulación, 7 pero, a ustedes que sufren la tribulación, con alivio juntamente con nosotros al tiempo de la revelación del Señor Jesús desde el cielo con sus poderosos ángeles 8 en fuego llameante, al traer él venganza sobre los que no conocen (porque no han querido) a Dios y sobre los que no obedecen las buenas nuevas acerca de nuestro Señor Jesús (más bien al contrario, se han opuesto a ellas). 9 Estos mismos sufrirán el castigo judicial de destrucción eterna  de delante del Señor (en la “gran tribulación”) y de la gloria de su fuerza.” (Acotaciones nuestras).

Luego es obvio que la “gran tribulación” está también directamente relacionada con el regreso de Jesucristo a la tierra y por lo que esta no puede iniciar, si Cristo no está presente…… y dado que el Hijo de Dios aparece vencida la primera mitad de la “semanita” en cuestión y con él la “gran tribulación”, resulta que solo nos quedan tres años y medio por delante para que la tal se pueda producir y por lo que es del todo imposible que dure “siete años” y como afirma el “teólogo” Apologista Mario Olcese. Con lo que tenemos lo siguiente, a modo de resumen: dicha “semana 70” se divide en una primera parte (tres años y medio) caracterizada por una bonanza que permitirá la rápida extensión del proceso de testificación y una segunda mitad (los restantes tres años y medio) de “gran tribulación”, en la que serán castigados aquellos que no hayan aceptado someterse al gobierno del reino de Dios.

Por lo tanto y contrario a lo que ese “number one” de la teología, de forma tan categórica afirma (actitud propia del ignorante, según Aristóteles), ni la “gran tribulación” dura siete años, ni Jesucristo aparece al final de la misma…… pero claro, cuando uno confunde la Biblia con la hoja dominical de la parroquia más cercana, cuando no con las “Aventuras del Capitán Trueno”, suelen producirse estos desaguisados y que no hacen otra cosa, más que mostrar el nulo nivel de entendimiento escritural del que los perpetra y por muy “teólogo” que afirme ser. Pero no crean que la cosa acaba ahí, porque en el próximo artículo les hablaremos de otras “genialidades” de las que también es autor el ínclito personaje que responde al rimbombante nombre de Apologista Cristiano, Ignº. Mario Olcese Sanguineti (Teólogo por el Instituto de Teología Baxter de Honduras); por lo que nos permitimos el atrevimiento de recomendarles que permanezcan “atentos a la pantalla”…… pues de todo se aprende un poco.

MABEL