martes, 5 de agosto de 2014

Carta abierta a Apologista Mario Olcese.


Acabo de visionar, Sr. Olcese, su video “Reflexiones... XXV” de fecha 04/08/14 y en el que usted parece “salir al trapo” del tema que recién acababa de publicar un servidor, bajo el título “La última “barrabasada” de Apologista Mario Olcese” y que aquellas personas que nos honran con sus visitas, pueden encontrar en este artículo del 03/08/14. Sorprendentemente, su grabación titulada “¿Son de Cristo los fieles del Antiguo Testamento?” y como el propio titular indica, absolutamente nada tenía que ver con el contenido del escrito que ha motivado su rápida respuesta y que un servidor, había publicado rebatiéndole su disparatada afirmación en el sentido de que en el reino de Dios o milenio, continuarán existiendo la muerte y el dolor…… lo que me lleva y ante la ausencia de referencia alguna a lo por mí publicado, a formularle la siguiente pregunta: ¿debo de pensar que acepta la “enmienda a la totalidad” que le planteé y reconoce con ello su error, al exponer semejante salvajada? ¿O es que de nuevo nos encontramos ante otra de sus estrambóticas “enseñanzas” que no es capaz de defender cuando alguien se la objeta y por ello opta, como siempre, por dar la callada por respuesta para que no se note la metedura de pata? Le confieso que me gustaría que, o bien reconociera su error en el caso de ser así, o bien que me rebatiera los argumentos que le he presentado para desmotar semejante disparate; dicho lo cual, pasemos a analizar el contenido de su exposición.

Como primera providencia, Sr. Olcese, decirle que yo sigo sus publicaciones, exactamente igual como usted hace con las mías, con la única diferencia que yo nunca he negado dicha circunstancia y usted en cambio, nunca la ha reconocido; como segunda providencia, decirle que cuando se cita de un texto, hay que asegurarse de que se hace de modo correcto para que le lector se entere de lo que le estamos hablando…… sin embargo, usted y al inicio de su video, transcribe un texto que no se corresponde con el enunciado, eso es, que adjudica a Rom. 2:20-24 el texto que se encuentra en Sant. 2:20-24 y lo que ya nos habla de la “ligereza” con la que trata la Palabra de Dios. Y ya como tercera providencia, usted no es mi amigo pues a estos los escojo yo y usted, de momento, está muy lejos de reunir los requisitos que debe de atesorar la persona a la que un servidor considera un amigo; dicho lo cual, le respondo a la pregunta que de entrada me formula, en el sentido de si yo entiendo que los que componen la “iglesia” o “cuerpo de Cristo” son todos los bautizados y a lo que respondo afirmativamente…… todos los bautizados en espíritu santo y bautismo que usted no posee, diga lo que diga y si no, demuéstrenos lo contrario. Y usted no puede poseer dicho bautismo (luego eso de “ungido”, nada de nada), pues con la muerte del último apóstol se acabó la posibilidad de transmitir dicho bautismo y como queda puesto de manifiesto en el capítulo 8 del libro de Hechos de los Apóstoles y tema que trato extensamente en mi escrito del 14/09/10…… por lo que usted no es más que un farsante y un mentiroso, cuando afirma cosas como las siguientes:

Yo soy un UNGIDO del Señor, y nadie debe o puede tocarme a mí, o a usted, si en verdad es un cristiano, sin tener luego que pagar un precio muy caro. Yo me considero un UNGIDO del Señor, y si usted no se considera así, entonces usted no ha entendido lo que significa ser un cristiano o un ungido.” (Negritas mías).

O bien esto otro y hablándonos de su anterior membresía en la organización de los TJ:

Al contrario, soy un hombre muy feliz y dichoso, ya que por fin tengo la libertad que no gozan ellos para escribir y tener mi sitio web donde puedo exponer mis creencias personales y mis “descubrimientos” bíblicos según me lo revela el Espíritu de Dios. Sólo el Espíritu de Dios nos guía a la verdad.” (Negritas mías).

Por lo que habría que entender, Sr. Olcese, que la enseñanza de los “millones, miles de millones” que tenían que reinar con Cristo y que le estuve rebatiendo por espacio de casi tres años, también se la había revelado el “espíritu de Dios”…… sin embargo me reconocerá usted y ahí está la hemeroteca para avalar mi afirmación, que finalmente le hice reconocer que estaba totalmente equivocado en dicho planteamiento y lo que le obliga a buscar una fuente de información más fiable. Y ello nos lleva a algo que usted nos dice en el video mencionado, en donde nos señala el tremendo error de los TJ y que compartimos sus detractores de la lejana España, al sostener la idea de que solo 144.000 son los que reinaran con Cristo, en lugar de una ingente cantidad de personas como usted propone…… pero en llegando ahí, permítame un inciso: a ver si puede conseguir, el dejar de mezclar lo que dicen los TJ con lo que yo digo, pues nada tiene que ver una cosa con la otra; porque yo solo digo aquello que dicen las Escrituras y no lo que dicen los TJ, que sinceramente me importa más bien un rábano. Ya otra cosa es que las opiniones coincidan, pero circunstancia que no nos coloca en el mismo plano; como no me coloca a mí en el plano en el que usted está situado, porque defienda al igual que usted que el reino de Dios ejercerá desde la tierra y no desde el cielo como proponen esos señores: sencillamente son coincidencias de opinión y por lo que usted continúa siendo uno y servidor, algo totalmente distinto.

Dicho lo cual, volvamos a su afirmación en la que niega que las Escrituras digan expresamente que solo 144.000 son los que reinarán con Jesucristo durante el milenio…… pero en todo caso y como mínimo, Sr. Olcese, estará de acuerdo conmigo en que no es menos cierto que tampoco se nos dice de forma explícita lo contrario en el registro escrito; sin embargo, lo que prueba que usted está equivocado en su planteamiento y que yo tengo razón en el mío, es que nunca me ha respondido a la siguiente cuestión y que le tengo planteada en numerosos de mis escritos: ¿qué debemos entender, entonces, de las palabras de Rev. 14:1 y a la luz del Sal. 2:5-6? Y fíjese Sr. Olcese, que no le hablo de lo que dicen los TJ, sino de lo que está escrito en dos pasajes bíblicos y como en tantas ocasiones he hecho; por lo que no puedo dejar de pensar, que si usted hubiera podido hacer frente a esta cuestión ya lo habría hecho y lo que me lleva a concluir, que de nuevo se ve usted acorralado (como en el caso mencionado de los “millones, miles de millones”) y ahí se está debatiendo en esperpénticas series como la que está metido sobre “razonamientos de no sé qué”, para al final no decir nada y emular así al tramposo “trilero” que vive de engañar al “personal. Porque eso es lo que usted hace o, al menos intenta hacer, mediante esos rollos “patateros” que nos coloca y que si uno los sigue, al final se queda sin saber claramente que es lo que está intentando explicar.

Pero claro, resulta que usted dirige el foco de atención en el video señalado, a la posición que ocuparán los Abrahán, Moisés, David y compañía en el reino de Dios, e incidiendo en el personaje Abrahán, resaltando que no es un personaje de segunda fila y algo que a mí nunca se me ha pasado por la cabeza; lo que yo me he limitado a señalar, son las palabras que dijo el propio Hijo de Dios (que algo más que usted sabría de qué iba la cosa), en el sentido de que Juan “el bautizante” era el personaje más grande o “mayor” en orden de importancia “de entre los nacidos de mujer” y lo que pone al resto de personajes del AT, en una posición secundaria con respecto de él. Y no olvidemos que el propio Juan, no formará parte de ese gobierno del reino de Dios (cuánto menos esos que son “menores” que él), a tenor de la idea que expresó Jesús en Mat. 11:11-12 y que tiene usted perfectamente desarrollada en mi anterior escrito del 12/07/14 y de la que no ha dicho nada aún…… teniendo en cuenta y según un correo que me envió que tengo publicado, que montó ese esperpento llamado “Razonamiento a partir de las Escrituras” precisamente para responder a la cuestiones que le tengo planteadas en dicho escrito y en la que se incluye la mencionada. Sin embargo, 25 capítulos nos contemplan, eso es, 393 minutos (o lo que es lo mismo, casi 7 horas de verborrea absurda y estéril) para al final no aclarar ninguno de los puntos objetados.

Ahora bien, volviendo a dichos personajes del AT, me permito el señalarle que fue usted mismo el que en un video dirigido a un servidor, fechado el 12/03/13 y titulado “¡No, don Armando, usted debe responderme esto primero...!”, afirmó y apoyándose en Rev. 20:4, que solo reinarán con Cristo aquellos que hubieran pasado por la “gran tribulación” venidera y que hubieran enfrentado a la bestia, al falso profeta y que no hubieran recibido la marca en sus frentes…… algo que usted y para refrescar su memoria, puede encontrar, así como aquellos que deseen comprobar la veracidad de lo que yo digo, entre los minutos 16 y 19 de esa grabación mencionada. Porque si ello es como usted con tanto énfasis afirmaba en dicho video, quedarían automáticamente descartados para participar en ese gobierno del reino los personajes del AT de los que usted nos cita y en una flagrante contradicción con su actual afirmación, pues estos murieron hace milenios…… ¡es más, quedarían descartados también de participar en dicho gobierno del reino los mismísimos apóstoles, pues es obvio que tampoco podrán pasar a través de dicha aún venidera tribulación, al llevar casi 2.000 años muertos! Luego sería cuestión de que se aclarara un poco y nos explicara como cuadra lo dicho hace poco más de un año, con lo que nos dice ahora acerca de los referidos Abrahán, David, Moisés y tantísimos otros…… porque, o bien es lo uno o bien es lo otro, pero las dos cosas al mismo tiempo desde luego no pueden ser.

Por otra parte, aún espero que nos aclare cómo puede ser y según usted plantea, que los sobrevivientes de la “gran tribulación” de Rev. 7:14 también puedan formar parte de ese gobierno del reino, eso es, el reinar al lado de Jesucristo, si ello solo lo pueden hacer aquellos que participan de la llamada “primera” resurrección de Rev. 20:6:

Feliz y santo es cualquiera que tiene parte en la primera resurrección; sobre estos (luego no sobre otros) la muerte segunda no tiene autoridad, sino que serán sacerdotes de Dios y del Cristo y reinarán con él por los mil años.” (Acotación mía).

Lo que le plantea tres “pequeños” problemas a su disparatada propuesta, Sr. Olcese y que son los siguientes:

1º- La mencionada “primera” resurrección se produce tres años y medio antes de que finalice la tal “gran tribulación” y aparezcan dichos sobrevivientes.

2º Si estamos hablando de “sobrevivientes”, ello significa que son personas que pasan al reino de Dios con vida y por lo tanto, al no haber muerto, no pueden participar de ninguna resurrección.

3º Aún en el caso de aquellos que murieran durante dicha tribulación, tampoco podrían participar en esa “primera” resurrección, pues esta acontece antes de que se inicie dicho período de tribulación y en la que ellos pierden la vida.

Dicho argumentario y que en España entienden hasta los “tontos de pueblo” (que serán tontos, pero son más listos que el hambre), resulta que se le hace inaccesible a un personaje como usted que, dándoselas de teólogo, es capaz de decir la salvajada de que durante el milenio existirá la vejez, la enfermedad y la muerte y el dolor que esto lleva aparejado…… y que, repitiéndome en mi exposición inicial, siendo el caso de que su video es la respuesta a mi escrito en el que denuncio su última “barrabasada”, he echado de menos que en el mismo dijera alguna cosa sobre el particular, por lo que habría de entenderse que acepta la rectificación, o más bien y como le planteo al inicio de este escrito, que no sabe cómo responder a la misma.

Usted, Sr. Olcese y a mi entender, tiene un grave problema y del que no se ha dado cuenta: es tanto su orgullo, altanería y prepotencia, que no puede soportar que una persona como yo, sin estudios y que después de mi expulsión de los TJ y como tantos otros, recaló en su blog para empezar a entender que las cosas no eran como durante tantos años me las habían contado, ahora se le haya subido a las barbas y le dé continuamente sopas con honda en cuanto a conocimiento bíblico. Y no entienda, Sr. Olcese, que con eso pretendo darme una importancia que es obvio no tengo; porque de lo que yo puedo presumir y si es que puedo presumir de algo, es de que Jehová me permita entender Su Palabra y por lo que no puedo estar hablando de ningún mérito personal…… solo que mientras para mí, la verdad revelada en dicha palabra está ante todo, para usted lo primordial es el tener la razón a toda costa.

Pero mientras usted intenta desprestigiar mis razonamientos, recurriendo a airear mi pasado como miembro de dicha secta, se olvida de lo más importante y es que quién da y quita razones es la Palabra de Dios y no las personas; por ello, yo escribo aquello que honradamente entiendo que esta dice y sin ningún temor de que salga alguien y me rectifique en algo, pues eso me enriquecería y lo cual agradecería infinito, pues me estaría enseñando. Sí, sí, ya sé que usted se arroga el ser este alguien, pues en su video menciona que algún día me daré cuenta de que usted tiene la razón en sus postulados…… de momento, no obstante, ahí tenemos el “affaire” de los “millones, miles de millones” que juegan a mi favor; pero es que además, cuando se me acerca alguien afirmando con gran convicción el ser un “ungido” y como usted hace, lo primero que hago es proteger mi cartera (por si acaso) y después, pensar en las palabras del apóstol Pablo y muy apropiadas para estos casos:

Porque no el que a sí mismo se recomienda es aprobado, sino el hombre a quien Jehová recomienda.” (2 Cor. 10:18).

Y mientras usted continúe buscando solo el tener la razón e intentando ajustar lo que dice la Biblia a lo que usted cree, en lugar de ajustar lo que usted cree a lo que esta dice y que es algo muy distinto, se está manteniendo en la condición de opositor a Dios y por lo que Este no le permitirá entender Su Palabra, por mucho que se empecine:

En aquella misma hora se llenó de gran gozo en el espíritu santo y dijo: “Te alabo públicamente, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido cuidadosamente estas cosas de los sabios e intelectuales y las has revelado a los pequeñuelos. Sí, oh Padre, porque el hacerlo así vino a ser la manera aprobada por ti.” (Luc. 10:21).

Entonces queda claro que el entender las Escrituras no depende de lo que uno quiera, sino de lo que Jehová le permita y lo que probaría, el que uno ha sido “recomendado” por Este…… y que todo indica que este no es su caso. Por lo que su adversario Sr. Olcese y al que se está enfrentando, no soy yo sino que es usted mismo; porque en todo caso yo no soy más que un “mandao”, eso es, el medio que quizás y de alguna manera Jehová pueda estar utilizando, para señalarle que tiene usted que cambiar de actitud; por lo que de nada sirve que “mate” al mensajero, pues el Autor del mensaje continúa estando ahí…… y Su mensaje, escrito en la Biblia.

Armando López Golart

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